Luego de una floja campaña, Newell’s se dio el gusto este domingo de cerrar el torneo de primera división con una victoria en Monumental, 2-0 sobre River, que también cerro un discreto campeonato y tiene la cabeza en el plano internacional. La Lepra terminó con 40 puntos y ya se enfoca en la Liguilla que puede darle un lugar en la próxima Copa Sudamericana.

Los goles del equipo rosarino en Núñez llegaron el segundo tiempo y fueron marcados por Maximiliano Rodríguez (20 minutos del segundo tiempo) e Ignacio Scocco (42’).

En un primer tiempo discreto y con escasas emociones, los dos tuvieron aproximaciones aisladas y por lo general encontraron firmes al arquero rival cuando la pelota fue al arco.

El Rojinegro inquietó cuando se juntaron Maxi Rodríguez con Lucas Boyé arriba o con disparos de Mauricio Tévez desde afuera, mientras que el local también apeló mayormente a arrebatos individuales pero lejos del buen juego.

El inicio del complemento mostró a un River más decidido y mejor coordinado. Se apoderó de la pelota y en pocos minutos generó un par de situaciones claras de frente al arco de Ezequiel Unsain pero la falta de puntería mantenía el marcador en cero.

Pero el más efectivo fue el equipo de Lucas Bernardi, que aprovechó un error defensivo millonario para ponerse arriba, luego de una pelota que robó Denis Rodríguez para asistir a su primo Maxi, que no perdonó.

Los de Marcelo Gallardo acusaron el golpe y perdieron intensidad, aunque Newell’s se mantuvo conservador con el resultado a su favor. Sin embargo, el ingreso de Scocco en el segundo tiempo tenía guardada una perla: gran volea de Nacho tras un centro, otra vez de Denis, y la pelota se clavó en la red de Julio Chiarini a poco del cierre.

Los leprosos ganaron y quedaron a la espera de otros resultados de la última fecha para conocer ante qué adversario se medirán la semana siguiente por la Liguilla Pre Sudamericana. En principio, era Unión y de visitante en Santa Fe.

River, por su parte, sigue golpeado tras el 0-1 del jueves a la noche ante Huracán en el mismísimo Monumental, con el que inició la serie semifinal de la Copa Sudamericana. Debe remontar esa serie mientras planea también el Mundial de Clubes de diciembre, todo en un contexto donde además del mal presente, su archirrival Boca celebró dos títulos en una semana.

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