Independiente del Valle de Ecuador se coronó campeón de la Copa Sudamericana al derrotar 2 a 0 al San Pablo de Brasil, con mucha presencia de argentinos en sus planteles y cuerpos técnicos, en un partido único disputado en el estadio Mario Alberto Kempes de Córdoba. Los goles del campeón fueron de los argentinos Lautaro Díaz y Lorenzo Faravelli (ex Newell's).

La apertura del marcador se dio a los 13 minutos, luego de un mal rechazo de la defensa brasileña que le permitió al rosarino Lorenzo Faravelli dominar en la medialuna del área, pensar y asistir con mucha clase a su compatriota Lautaro Díaz. El delantero se perfiló sin tocar la pelota y sacudió de derecha para el 1 a 0.

Luego, en el complemento, Independiente del Valle armó una maniobra colectiva fantástica. Jonathan Schunke lanzó un pase largo para Sornoza, que dominó con el pecho y filtró la pelota aérea para la corrida en diagonal del centro hacia la izquierda de Lautaro Díaz, que de primera metió la pelota al punto del penal. Allí apareció el rosarino Lorenzo Faravelli, que definió con un toque suave para sellar el 2-0.

La frase de Tata Martino que insipiró a Lorenzo Faravelli


El ganador del certamen se llevó como premio 5.000.000 de dólares, sumando con lo ingresado en las restantes fases un total de 8.025.000 dólares.

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Independiente del Valle fue fundado hace apenas 15 años en Sangolquí, a 70 kilómetros de Quito. La de este sábado fue su cuarta final en torneos de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol): ganó la Sudamericana en 2019 (superó a Colón en Asunción) y fue subcampeón de la Libertadores en 2016 (cayó frente a Atlético Nacional de Medellín) y de la Recopa Sudamericana en 2020 (perdió con Flamengo).

El club ecuatoriano es dirigido técnicamente por el argentino Martín Anselmi, de 37 años y nacido en Buenos Aires. Formado como periodista deportivo, se declara admirador de Marcelo Bielsa y fue ayudante de Gabriel Milito en Independiente.

Anselmi, ex ayudante de Gabriel Milito y de escuela bielsista, es el DT de Independiente del Valle.

En el plantel cuenta con gran presencia de futbolistas argentinos: Lautaro Díaz, Mateo Carabajal, Richard Schunke, Cristian Pellerano y el rosarino y ex Newell's Lorenzo Faravelli.

Entró a la Sudamericana por haber terminado tercero en el grupo D de la Libertadores (detrás de Atlético Mineiro y Deportes Tolima). Los ecuatorianos dejaron en el camino a Lanús, al Deportivo Táchira venezolano y al Melgar peruano con un raid de cinco victorias y un empate (marcó 13 goles y apenas recibió 2).

Del otro lado, la historia y los pergaminos hacían que San Pablo se considerase favorito en la previa de la final. El Tricolor, dirigido por el ex arquero Rogerio Ceni, marcha 12° en el Brasileirão, a 23 puntos del líder Palmeiras, aunque en sus últimas dos presentaciones venció a Ceará y Avaí.

Para acceder a esta final, el conjunto paulista ganó el grupo D (relegando al Everton chileno, al Ayacucho peruano y al Jorge Wilstermann boliviano), se floreó ante la Universidad Católica de Chile en los octavos de final y luego tuvo que batallar hasta la definición por penales para eliminar a otros dos equipos brasileños: Ceará y Atlético Goianiense.

En la delantera estuvo el ex Boca Jonathan Calleri (autor de 21 goles este año), mientras que también integran el equipo Giuliano Galoppo y Nahuel Bustos.

 

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