En el marco de la la quinta jornada del juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa en los tribunales de Dolores, un efectivo de la policía bonaerense que cumple tareas en Villa Gesell aseguró que fue el rugbier Máximo Thomsen quien involucró falsamente al remero Pablo Ventura en el asesinato del joven de 18 años.

Mariano Rolando Vivas declaró en el quinto día de audiencias y reveló:  Thomsen manifestó que la zapatilla marca Cyclone negra con suela blanca y manchada con sangre encontrada en la vivienda alquilada por los rugbiers, era de Pablo Ventura", dijo el efectivo.

Vivas contó además que participó del operativo de arresto de los rugbiers y que fue quién pidió los videos del boliche Le Brique en los que se ve cuando sacan por la fuerza a Fernando y a los rugbiers.

Sobre el día del arresto, el policía dijo que cuando llegaron a la casa "salió una persona de sexo masculino" que "tenía una colita" y que "era uno de los jóvenes que estuvieron en el lugar del hecho". Después detalló que "salieron diez personas", momento en el que a fiscalía les dijo que "los aprehendan y que nadie entre al domicilio".

"Se incautaron 10 celulares", agregó el policía, quien manifestó que los rugbiers en ese momento "no fueron agresivos" y "nunca se resistieron".

Hugo Tomei, el abogado de los rugbiers, le consultó sobre el motivo por el cuál no se hizo constar en un acta quien había mencionado al remero Ventura. Vivas respondió: "Son manifestaciones que la fiscalía dijo que no pongamos, así que se encargó la DDI".

Ventura fue incriminado falsamente en las primeras horas de la investigación del crimen de Baéz Sosa. Antes de declarar —este último miércoles—, dijo que "no le sorprendió" lo que hicieron los acusados del homicidio porque ya habían tenido peleas y agregó que no sabe puntualmente el motivo por el que lo hicieron. 

Además, según se supo, al momento de ir al estrado, "varios de los rugbiers se burlaron de él". Así lo contó Paula Bernini, periodista de TN que cubre el juicio desde adentro.