Lo habían anticipado y cumplieron. Aunque el gobernador Omar Perotti anunció que las medidas dispuestas hace dos semanas se extendían por siete días más, algunos hicieron caso omiso. Entre ellos están propietarios de gimnasios de la ciudad quienes este sábado abrieron sus puertas.

"Nosotros, desde nuestro rol, fuimos responsables desde el primer momento y recomendamos no abrir y acatar las decisiones oficiales, algunos dueños se autoconvocaron y decidieron abrir y también lo apoyamos porque entendemos que nuestro rubro es esencial. Somos parte de la solución y no del problema", afirmó a Rosario3 Luciano Gottig, el titular de la Asociación de Gimnasios de Rosario.

A pesar de que no está habilitada la práctica de actividades deportivas y físicas en instalaciones cerradas, o espacios públicos al aire libre, en la mañana de este sábado se estima que abrieron entre 15 y el 20% de los gimnasios de la ciudad. Aunque se espera que el lunes se abran las puertas del 70% de los centros de entrenamiento dado que por cuestiones logísticas, muchos de ellos no se pusieron en funcionamiento.

"Hicimos un pedido oficial. Le expresamos en una carta al intendente de la ciudad y al gobernador para que nos habiliten a estar abiertos desde las hora cero del sábado. Somos el único rubro esencial al que le prohiben funcionar. No entiendo por qué puede abrir una peluquería y nosotros, no", marcó Gottig.

En función de los controles municipales, el titular del ente que nuclea a los gimnasios rosarinos aseguró que "hubo reportes mínimos de la Guardia Urbana para constatar movimientos pero ningún dueño nos nos dijo que los hayan clausurado" 

El dato en el que se apoyan desde la Asociación de Gimnasios de Rosario es que no hubo circulación de covid-19 en ninguna instalación desde que se les permitió abrir bajo los protocolos indicados. "Cada 15 días hicimos una trazabilidad junto a la Secretaría de Deportes y están todos los informes documentados. No hubo ningún caso de contagio por circulación comunitaria en los gimnasios", sostuvo Gottig.

A esa problemática se suma que desde el martes los municipales realizarán un paro de 72 horas. Medida que complicaría eventuales controles sobre la actividad.