El uso de dióxido de cloro, como presunto remedio contra el coronavirus, volvió a ser el centro de la polémica durante las últimas horas. La imagen de Viviana Canosa ingiriendo una preparación líquida en vivo televisión, propició un nuevo espacio para la discusión. Sin embargo, los especialistas, médicos e investigadores coinciden en desaconsejar su uso.

Así ocurrió con el doctor en Ciencias Biológicas, Arístides Pochettino, que este viernes fue consultado al respecto en el programa A Diario de Radio 2: “El dióxido de cloro se usa para desinfectar, permite eliminar bacterias pero sólo en superficies. No es para tomar”, dijo

El investigador del área de Toxicología de la Universidad Nacional de Rosario aseguró que puede generar diferentes tipos de úlceras: “Tomar desinfectante como tal es de suma gravedad”, dijo.

Y agregó: “La gente cree que los protege y no es así. Puede llegar a producir problemas en la sangre, afecta el transporte de oxígeno y eso causa problemas respiratorios”.

Al respecto, un oyente de la radio contó que toma dióxido de cloro y explicó que lo preparaba en su casa porque no está permitida su comercialización.

Eso provocó la intervención del doctor Gastón Chiganer, integrante del programa, desaconsejando la práctica: “No hay evidencia ni estudios que muestren su efectividad. Y pueden traer problemas de intestino, estómago o esófago”, dijo el médico.

A su vez, Chiganer indicó: “Como medio de comunicación tenemos la responsabilidad de advertir que no hay que informarse por videos de internet o confiar en curaciones milagrosas”, dijo.

Finalmente, Pochetino sentenció: “El dióxido de cloro no es un medicamento, es una sustancia para limpiar. Cuando uno compra un desinfectante, en el envase se explica claramente que no se puede consumir”.