Este lunes es la sexta jornada del juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, el joven asesinado en enero de 2020 a la salida del boliche Le Brique en Villa Gesell. Fue el turno de la declaración de los médicos forenses, que aportaron detalles y resultados de cada golpe que recibió el chico de 18 años por parte de los rugbiers acusados.

El forense que realizó la autopsia al cuerpo de Fernando Báez Sosa, cuatro médicos, dos policías y funcionarios municipales y judiciales son quienes declaren este lunes en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) de Dolores.

"Vi que tenía una importante hemorragia dentro del cráneo", afirmó Diego Duarte, el médico forense que le practicó la autopsia a Báez Sosa. Los padres de Fernando se retiraron por unos minutos de la sala principal.

En su declaración durante la etapa de instrucción de la causa, Duarte aseguró que el cuerpo de la víctima "presentaba hemorragia masiva intracraneana, hematomas y excoriación en cara lateral izquierda de cuello y mandíbula", además de "la impronta de una marca de zapatilla".

Mientras excibieron imágenes muy fuertes del cuerpo de Fernando, sacadas durante la autopsia, los padres del joven asesinado no estuvieron en la sala de audiencias. Los imputados, atentos a lo que se muestra.

En su testimonio, Duarte, el forense que atendió a Báez Sosa aseguró que el cuerpo "no presentó daños óseos", pero que los golpes fueron suficientes y determinantes para causarle "un derrame cerebral" a Fernando. 

El forense describió heridas "incompatibles con la vida". (Télam)

"No hay apertura, lesiones que hayan lastimado la parte ósea, los golpes que recibió fueron suficientes para dañar el cerebro sin romper la parte ósea", especificó el especialista. Y agregó: "Se detectó mucho sangrado y mucho coagulo en cerebro, cerebelo y tronco encefálico; compatible con la aplicación de golpes".

Otro citado a dar su testimonio ante los jueces hoy es el médico Alejandro Javier Verlatsky, quien le extrajo muestras de sangre a los inicialmente 10 acusados en la causa por el crimen, dos de los cuales fueron luego sobreseídos (Juan Pedro Guarino y Alejo Milanesi).

Otros cuatro policías sumarán sus testimonios a los colegas que ya declararon la primera semana del debate. Incluso uno de ellos, dijo que fue Máximo Thomsen quien incriminó a Pablo Ventura.

En esta oportunidad serán un efectivo y un funcionario de la Municipalidad de Villa Gesell que obtuvieron las cámaras de seguridad de la zona del boliche Le Brique, del que fueron sacados Fernando junto con sus amigos por un lado y, por otro, los imputados.

Además, declarará el policía bonaerense Ramón Rueda, quien identificó a un testigo que vio al rugbier Máximo Thomsen realizar una señas agresivas cuando aún estaba adentro del boliche, instantes antes del ataque a Fernando en la vía pública.

La jornada del sexto día de audiencias finalizará con los testimonios de tres funcionarios judiciales que estuvieron presentes en el lugar del hecho en las primeras horas de haber sucedido.

Al igual que ocurrió durante toda la semana pasada, luego que declararan como testigos, está previsto que los padres de Fernando presencien las audiencias en la sala de audiencias del primer piso de los tribunales.

Los ocho imputados -Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano (21), Ciro (22) y Lucas Pertossi (23)- también estarán presentes, al igual que desde la apertura del debate oral.