El dramático incendio ocurrió este lunes por la tarde en Malagueño, Córdoba, cuando se desató el fuego en un campo detrás de una estación de servicio. Los playeros lograron cumplir con éxito el protocolo de seguridad para prevenir una explosión en las instalaciones sin sufrir ningún tipo de daño físico.

El empleado Ezequiel Senardo admitió, en diálogo con Cadena 3: “Cuando vi que el fuego pasó unos árboles que están a la vista, alarmé a mi otro colega, Maximiliano. Le dije que viniera porque íbamos a necesitar liderazgo para organizarnos, porque hay chicos que son nuevos y sin experiencia", contó.

Calculo que el fuego llegó a dos metros de la estación. Ganamos minutos regando y tirándole a la base del fuego. Yo luché por mí mismo y por mi trabajo", concluyó.