Cualquiera que transite estos días por la zona sur de Rosario, cerca del predio del ex Batallón 121, encontrará que en muy poco tiempo el paisaje cambió mucho. El Museo del Deporte ya no está solo: junto a él se levantan, a una velocidad poco frecuente, las cinco torres de ocho pisos que compondrán la villa olímpica donde se alojarán los deportistas que participarán en los Juegos Suramericanos Odesur 2026. Las competencias se desarrollarán en septiembre de 2026 en tres sedes: Rosario, Santa Fe y Rafaela.
Esa transformación en la zona del ex Batallón, cerca de donde se construirá también el centro de competencias acuáticas, acaso sea hoy la más visible. Pero hay que sumar varias otras que, con epicentro en el parque Independencia, formarán parte de la inversión en obras públicas motivada por la realización de un evento que puede marcar un antes y un después, al menos en materia de infraestructura deportiva en la provincia.
Los XIII Juegos Suramericanos Santa Fe 2026 convocarán a más de 7.000 deportistas de 15 países y 54 disciplinas. Más allá del calendario deportivo, representan una intervención urbana inédita en las tres sedes: al menos doce grandes obras entre nuevos estadios, piletas, microestadios y villas olímpicas que se traducen en inversión, empleo y legado a largo plazo.
El gobierno de Maximiliano Pullaro asegura que llegará a tiempo con todas las obras, con una buena noticia de los últimos días: el Ministerio de Economía de la Nación se apresta a firmar la autorización para que Santa Fe tome un crédito de 78 millones de dólares de la Corporación Andina de Fomento (CAF) destinado a financiar la nueva infraestructura deportiva. Que el trámite pueda tener demoras formales no genera preocupación: la Provincia ya destinó fondos propios para garantizar el ritmo de ejecución, ya que tiempo no sobra. La semana que viene, el gobernador recorrerá las obras del Centro Acuático Provincial, las más rezagadas. “Vamos a llegar justo con esa”, reconocen en su entorno.
Las obras más importantes
En Rosario se concentrará la mayor parte de las competencias y de las obras de infraestructura más ambiciosas. Las principales son las siguientes:
Villa Suramericana del ex Batallón 121. Ubicada entre Ayacucho, Ibáñez y la prolongación de Benito Juárez, ocupa tres manzanas y 7.900 metros cuadrados de terreno. El conjunto estará integrado por cinco torres de ocho pisos, con 21.342 metros cuadrados cubiertos y 245 departamentos que sumarán 1.485 camas para deportistas. La obra presenta un avance del 30 % según un informe de la semana pasada, aunque el consorcio constructor, con una de cuyas autoridades habló Rosario3, estima que ya superó el 40 %.
El complejo no solo incluye las viviendas sino también un amplio programa de infraestructura complementaria, organizado en tres áreas funcionales: una zona residencial, destinada al alojamiento y bienestar de los atletas, con 1.700 m² de espacios comunes (gimnasio, comedor, policlínico y oficinas de delegaciones); una zona internacional, de encuentro entre delegaciones y público, con plaza de ceremonias y servicios de prensa; y una zona operativa, para logística, acreditaciones y seguridad.
Después de los Juegos, las 245 unidades se destinarán a viviendas para sectores medios de la población, con financiamiento accesible. La Provincia actuará como garante para facilitar el crédito hipotecario a los adjudicatarios y recuperar parte de la inversión. Se trata de un proyecto postergado desde hace cerca de una década para la urbanización del ex Batallón 121, cuya licitación ganó el consorcio Dirsu, integrado por los grupos Eskenazi, Eurnekian y Pecam, que luego de los Juegos comercializará los inmuebles.
Multiespacio Arena. A pocos kilómetros, en el predio ferial del parque Independencia, avanza esta estructura polivalente, que a la semana pasada tenía un 23 % de avance. Podrá recibir hasta 13.000 personas en eventos artísticos y entre 4.500 y 5.150 en competencias deportivas. Será el mayor recinto cubierto de la provincia y una de las sedes más importantes de los Juegos: albergará básquet, vóley, handball, patín artístico y gimnasia deportiva.
Microestadio Independencia. En el mismo parque, el microestadio registraba un 18 % de avance a la semana pasada y tendrá capacidad para entre 3.000 y 3.500 personas. Su diseño permite múltiples configuraciones para eventos deportivos y culturales medianos, con tribunas retráctiles y espacios auxiliares de entrenamiento. Será sede de disciplinas como esgrima, boxeo y lucha.
Centro Acuático Provincial. Ubicado detrás del Centro de Distrito Sur —y cuya obra visitará Pullaro el lunes— es la más retrasada, con solo 4 % de ejecución a la semana anterior. Constará de una pileta olímpica para 1.200 espectadores y otra de saltos ornamentales para 500. Allí se disputarán las pruebas de natación, waterpolo y nado sincronizado. Su proximidad con la casa natal de Lionel Messi sumará un valor simbólico adicional al sector sur.
En Santa Fe
Entre las obras de infraestructura deportiva, en la capital provincial se destacan tres. La principal es el Estadio Multipropósito CARD, con un 7,5 % de avance. Tendrá capacidad para 3.472 personas, con tribunas, palcos, pupitres de prensa, cabinas de transmisión y sectores para personas con movilidad reducida. Su diseño modular permitirá albergar básquet, vóley, handball, patín, boxeo, lucha, tenis, tenis de mesa, esgrima, pádel, atletismo indoor y gimnasia deportiva. Es una obra pensada para uso deportivo y cultural durante todo el año, como auditorio o espacio de conciertos.
A pocos metros, la renovación de la pista del CARD tiene un 18 % de ejecución y permitirá realizar competencias de atletismo de nivel internacional. En tanto, el Centro de Tiro Deportivo de Recreo, con un 33 % de avance, será la sede de las pruebas de tiro de precisión y aire comprimido. Su ubicación en el área metropolitana de Santa Fe responde a una lógica federal de distribución de sedes y a la idea de dejar equipamiento deportivo permanente en todas las regiones.
En la capital provincial, la villa olímpica se levanta en barrio Esmeralda. Son 346 viviendas en construcción, financiadas también con un esquema de participación público-privada.
Rafaela
En Rafaela, las obras también tienen impacto urbano. El Microestadio Distrito Joven alcanza un 15 % de avance y prevé un aforo para 3.080 personas. Su planta polivalente permitirá básquet, vóley, handball, patín y gimnasia, además de funcionar como auditorio para eventos sociales. Muy cerca se construye el Velódromo Cubierto, con un 14 % de avance y espacio para 450 espectadores y 50 puestos de prensa. Allí se realizarán las pruebas de ciclismo indoor y BMX freestyle. Ambas obras, según el informe provincial, convertirán a Rafaela en referencia de infraestructura deportiva para el centro-oeste santafesino.
En esa ciudad, la villa olímpica se levanta en el Distrito Joven del barrio Malvinas. Son 80 unidades habitacionales con un 50 % de avance. Es la más pequeña de las tres, pero tendrá alto impacto urbano por su ubicación estratégica junto al microestadio y el velódromo.
El financiamiento y los plazos
El paquete de obras de Santa Fe 2026 se financia con fondos del Estado santafesino y con un crédito de la Corporación Andina de Fomento (CAF) por 78 millones de dólares, garantizado por el gobierno nacional. La firma de esa garantía ya pasó el filtro de la Secretaría de Hacienda y se espera que el Ministerio de Economía la concrete en las próximas semanas. Mientras tanto, la Provincia aporta recursos propios para no detener el ritmo de obra.
Promoción y cuenta regresiva
Con las máquinas trabajando en las tres ciudades, la Provincia también puso en marcha la etapa de promoción cultural y comunicacional. En ese marco, el martes próximo firmará un convenio con la AFA para que la mascota oficial, Capi, salga a la cancha en los clásicos de Primera División como embajador de los Juegos. La iniciativa complementa la gran fiesta del Monumento a la Bandera del 2 de octubre, cuando más de 35.000 personas participaron del inicio de la cuenta regresiva. La campaña “Santa Fe Juega” busca posicionar al evento como una celebración colectiva, no solo deportiva, sino también cultural y turística.


