Durante un intenso partido del cual Newell's Old Boys se retiró victorioso por 1 a 0 frente a Rosario Central, el clásico rosarino estuvo cargado de polémicas jugadas que hicieron estallar al público en las tribunas del Gigante de Arroyito.

El encuentro entre leprosos y canallas por la séptima fecha de la Copa de la Liga Profesional tuvo varias ocasiones con intensos reclamos en contra del árbitro Pablo Echavarría, que por primera vez en su carrera ofició de juez en el derby rosarino.

Entre todas las situaciones que se vivieron durante el partido, hubo tres momentos destacados en los que Central reclamó con mayor énfasis y el juez no falló a su favor.

El primero de ellos fue a minutos del final del primer tiempo, cuando Julián Fernández le dio un codazo a Damián Martínez provocando que el número cuatro del equipo local quedara tendido en el suelo, dentro del área de Newell's. Echavarría decidió seguir adelante con el partido y no cobró infracción.

La segunda situación polémica llegó tan solo minutos después, cuando un pelotazo que golpeó de espaldas y cerca del hombro al defensor Willer Ditta despertó reclamos de una supuesta mano a centímetros del área de Macagno.

Por último, Martín Luciano se salvó de ver su segunda tarjeta amarilla y ser expulsado a los 10 minutos del segundo tiempo, cuando comentió una infracción sobre Lucas Gamba que provocó su estrepitosa caída sobre el césped.