El "arrepentido" Leonardo Meirelles, detenido en Brasil por la megacausa de corrupción "Lava Jato", confirmó que le pagó "coimas" al titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas, por orden de la empresa Odebrecht.

Acompañado por su abogado y una fiscal brasileña, Meirelles dijo por teleconferencia recordar al jefe de la AFI y aseguró haberle hecho diez transferencias por unos 850.000 dólares. Meirelles aclaró que él sólo se ocupaba de pagar coimas y aseguró que tiene la documentación probatoria, según informó Clarín.com.

Lo declaró ante el juez federal Sebastián Casanello y el fiscal Federico Delgado por otra causa relacionada con Odebrecth. Sin embargo, sus dichos repercuten sobre la investigación en la que Arribas había sido sobreseído por el juez Rodolfo Canicoba Corral, decisión que el fiscal general Germán Moldes decidió no apelar la semana pasada. 

Meirelles confirmó no sólo los cinco giros por 594 mil dólares —conocidos por una nota del periodista Hugo Alconada Mont— sino otros cinco giros que completarían un total de 850 mil dólares.   

La afirmación del cambista choca de frente con la defensa de Arribas, quien sólo había admitido una transferencia financiera por parte de Meirelles por 70.000 dólares, correspondientes al pago de una supuesta venta de muebles de su casa en Brasil (primero había dicho "inmueble").

La causa contra el jefe de los espías

El caso había comenzado en enero, cuando el diario La Nación denunció que en septiembre de 2013 el jefe de los espías había recibido por parte de Meirelles cinco transferencias a una cuenta suiza de Arribas, por un total de 600.000 dólares.

El funcionario, y luego todo el Gobierno, salieron al cruce de aquella información. Arribas se presentó ante la comisión bicameral legislativa de seguimiento de actividades de los organismos de inteligencia, y con ligeros cambios mantuvo su declaración.

La diputada Elisa Carrió hizo una denuncia penal en Comodoro Py para que el funcionario esclareciera su situación, expediente que le tocó al juez Casanello y al fiscal Federico Delgado. Pese a la insistencia de Delgado, el juez decidió cerrar la causa porque no había una acusación ni datos concretos contra el jefe de los espías. El fiscal apeló ante la Cámara Federal, pero su colega ante ese tribunal, Germán Moldes, desistió de sostener esa apelación, informó Clarín.com.

Sin embargo, el titular de la Procuraduría de Investigaciones Administrativas Sergio Rodríguez -quien participó de la videoconferencia- apeló en queja ese sobreseimiento, por lo tanto la investigación técnicamente permanece abierta.

La declaración de este jueves ante Casanello -por una causa en la que se investigan coimas por la obra de una planta de agua potabilizadora en la municipalidad de Tigre- revitaliza esa posibilidad.