La bajante del río genera preocupación en las autoridades municipales porque no existe a corto plazo la posibilidad de que llueva en las cuencas altas. La escasez de agua a la altura de Rosario y la región, pone en riesgo la navegación, la práctica deportiva y también, la actividad comercial ya que los barcos no pueden cargar ni descargar.

En diálogo con Radiópolis (Radio 2), el director de Defensa Civil, Raúl Rainone, confirmó que por estos días, el nivel del Paraná en la ribera local “oscila entre 1,80 y dos metros y no tiende a cambiar” y recordó que la altura óptima es de tres a tres metros y medio.

Para el funcionario municipal “esto va a durar un tiempo considerable ya que en las cuencas altas está pronosticado lluvia por debajo de la media, no está previsto que mejore a corto plazo. Esto agregado que en las cuencas altas se necesita agua y hasta que no se llenen no van a soltar agua para acá, ni en 20 ni en 25 días”.

La preocupación de las autoridades tiene que ver con que la bajante aumenta los riesgos de los navegantes al tiempo que señalaron las complicaciones que tienen los deportistas náuticos. Otro punto esencial es la actividad económica, ya que debido a la poca profundidad en la zona del puerto, se obstaculiza las tareas de carga y descarga. Según trascendió de parte de la Bolsa de Comercio de Rosario, había unos 61 buques inactivos a principio de mes.