Hacía mucho que la policía ya no secuestraba los famosos “pescadores” de los cajeros automáticos, pero este lunes encontraron dos una entidad bancaria del centro. Se trata de los dispositivos que retienen los billetes tras una extracción haciendo creer al cliente que el problema es que la máquina está vacía o dañada.

Según informó el periodista Hernán Funes de Radio 2, las chapas de metal fueron encontradas en dos cajeros del banco Francés de Córdoba 1935.

¿Cómo evitar caer en la trampa? Si el dinero no sale pero la máquina indica que la transacción fue exitosa, la primera medida de prevención es revisar la boca del cajero y comunicarse desde allí –no abandonar el habitáculo– a la policía para que vaya con un efectivo a constatar el estado de la máquina. Si el cajero está ubicado dentro o cerca de su banco –y además, está abierto– avisar al personal de seguridad inmediatamente.

Generalmente, los “pescadores” son aplicados en cajeros únicos, que se encuentran fuera de las entidades.