Los menores de 50 años que fuman, tienen ocho veces más posibilidades de sufrir un ataque cardíaco severo que quienes no lo hacen. Así lo asegura un estudio realizado en Inglaterra.

Otro dato llamativo es que la diferencia de riesgo entre quienes consumen tabaco y quien no, va bajando con la edad. La distancia se achica a cinco entre los 50 y los 65 años, y a tres entre mayores de 65.

Para los investigadores del centro de cardiología South Yorkshire del Hospital del Norte de Sheffield, Inglaterra, esto demuestra que fumar constituye un serio factor de riesgo que se manifiesta antes que cualquier otro.

Para llegar a esta conclusión, se examinaron datos de 1727 adultos que recibieron tratamiento por un problema cardíaco que se conoce como Stemi. Se trata de ataques cardíacos producidos tras una obstrucción total de una arteria coronaria.

Los resultados fueron concluyentes: la mitad de los pacientes que lo sufrieron eran fumadores, y estos tenían -en promedio- una década menos que quienes no fumaban, según consignó el portal Doc Salud.