Diego Maradona se rompe la cabeza por estas horas para definir el equipo que saldrá a la cancha del Centenario cuando la selección argentina visite a Uruguay este miércoles, a las 19, por la fecha que define las Eliminatorias sudamericanas para el Mundial 2010. Y una de las principales dudas del entrenador es quién acompañará en el ataque a Lionel Messi, luego de los goles de Gonzalo Higuaín y Martín Palermo ante Perú.

Maradona dijo tras el partido en River que una vez que llegara al predio que la AFA posee en Ezeiza iba a “agarrar el lapicito y empezar a delinear el equipo para jugarse la clasificación”.

Por el gol del triunfo del sábado, Palermo es aclamado y hasta exigido como titular para el duelo frente a los de Tabarez, sin embargo, Maradona deberá afinar bien el lápiz para que el plan de juego sea el más apropiado.

En la conferencia de prensa post partido, el mejor jugador de todos los tiempos anticipó que buscará la manera de incluir a Juan Sebastián Verón dentro del equipo, lo que hace suponer que en Montevideo se plantará para jugar de contragolpe, teniendo en cuenta que a la albiceleste con el empate le alcanza para asegurarse un lugar en el repechaje y hasta clasificar en forma directa a Sudáfrica 2010, si Ecuador no vence a Chile por cinco goles.

De ser ese el esquema para el “Operativo Montevideo”, la presencia de “San Palermo”, como lo bautizó Maradona tras su gol agónico, parece encontrar obstáculos, ya que por sus características, a priori, no parece la elección más apropiada. Menos aún cuando las alternativas que aparecen en el plantel son las de Higuaín, Sergio Agüero y Carlos Tevez, jugadores que se adaptan mejor a esa estrategia.

Si bien el del Atlético Madrid y el de Manchester City han perdido posiciones respecto de su titularidad por bajo rendimiento, el delantero del Real Madrid, solamente con su gol ante Perú y algunas auspiciosas apariciones parece ser la mejor opción.

Otra sería la historia si la clasificación estuviese asegurada o el rival de turno fuese más débil, porque ahí sí podría pensarse en salir a presionar y llenar el área rival de centros para el 9 de Boca. Sin embargo, las presiones, la tensión y por qué no el temor que rodea al seleccionado argentino por tan incómoda ubicación en su camino rumbo a Sudáfrica, llevan a pensar en un esquema más cuidadoso y con salidas rápidas a través de los arranques fulminantes de Messi y los pelotazos certeros del referente de Estudiantes de La Plata.

La presencia de la Brujita supondría la salida de Enzo Pérez en la mitad de la cancha, quedando Jonás Gutiérrez y Ángel Di María como mediocampistas externos, dos jugadores que, con su velocidad y capacidad de desborde, potencian la idea de que el Pipita repita titularidad el miércoles.

Por otra parte, todo hace suponer que volverá la línea de cuatro en el fondo, aunque ahí los nombres, a pesar de ser muchos, se limitan debido a la escasez de marcadores laterales. Sólo hay dos y ambos juegan por la izquierda. Ellos son Emiliano Insúa y Fabián Monzón.

El único 4 que había convocado Maradona era Pablo Zabaleta, pero este se desgarró el pasado fin de semana ante el Aston Villa jugando para el Manchester City por la Premier League, lesión que ocasionó los conocidos cruces entre Maradona y Carlos Bilardo.