El dolor y el drama por la inseguridad se hacen carne en Karina, la mamá de Aymara Altamirano y abuela de Auriazul, asesinadas junto a Rodrigo Morera, papá de la nena de 6 años, el viernes por la noche en un brutal triple crimen en la zona sur de Rosario. 

“Esto es algo que no se va a superar nunca más, mata a inocentes y la gente está aterrorizada”, dijo este lunes entre lágrimas y con la voz quebrada en De Boca en Boca (Radio 2). 

La noche trágica del viernes estuvo a punto de verse con Aymara (25 años) y Rodrigo (26), que se había quedado sin trabajo y pensaba pasar por la casa de la madre de Karina a buscar un bolsón con mercadería. Pero se habían escuchado “siete balaceras” en el barrio, como una premonición, y les pidió que fueran al día siguiente

Se fue a su casa y a los veinte minutos la empezaron a llamar de números que no tenía agendados: eran muchos vecinos que se querían comunicar para avisarle lo que estaba ocurriendo en ese momento en el pasillo de barrio Tablada. “Después mi nena atendió y era todo un griterío, no entendíamos nada, los vecinos me llamaban y me decían que le habían pegado a mi yerno y a mi hija”, siguió contando. 

“Cuando vine encontré el cuerpo de mi yerno ya sin vida, a mi hija tirada, la nena no estaba. Estaba la gendarmería y nadie quería hacer nada. Con dos personas más y mi esposo la levantamos, la subimos al auto, la llevamos al Roque Sáenz Peña y cuando llegamos ya estaba mi nieta también”.

De acuerdo al parte oficial, el hecho ocurrió pasadas las 23 en la zona de Garibaldi al 57. La joven familia había llegado hasta allí en un vehículo particular con el objetivo de visitar a un familiar.

Cuando estaban por ingresar al pasillo al menos cuatro personas, no identificadas al momento, comienzan a dispararles sin mediar palabras. Producto de las lesiones, Rodrigo falleció en el lugar, en tanto que su pareja y la menor fueron trasladadas de urgencia al hospital Roque Sáenz Peña donde murieron a los pocos minutos de ingresar

Karina también contó que la hermanita de Auri, que se salvó del feroz ataque a balazos porque su mamá la protegió y logró empujarla para que no la alcancen los tiros, pide todo el tiempo por su familia: “Hasta el día de hoy nos pregunta, dónde está mi mamá, mi hermana, se quiere ir para la casa. Cómo se hace para seguir con tanto dolor”.

"Gente de acá me dijo que corrían a otra pareja, se los confundieron. Dieron la vuelta porque no podían entrar con el auto, vieron que entraron mi yerno y mi hija y se habrán creído que eran ellos. Tiraron como 30 balazos, lo hicieron sin piedad”, contó este lunes en Radio 2. 

Mi hija era una mamá que luchaba, mi yerno trabajaba, no se metían con nadie", continuó con su desgarrador testimonio. También contó que la noche de la masacre había cuatro oficiales de gendarmería en la esquina de Garibaldi y Chacabuco, a bordo de una chata, que vieron toda la secuencia y no persiguieron a los asesinos que escapaban en auto. 

Reclamo e indignación por la inseguridad


En medio de tanta bronca y tristeza, Karina se refirió a la constante inseguridad que viven en su barrio: "Esto es una guerra entre ellos, no podes mandar a los chicos a hacer un mandado por el miedo que tenemos, no pueden disfrutar. Gendarmería vio todo y no hizo nada, ellos saben quienes son. Todo el barrio está indignado, los vecinos salieron todos".

También habló sobre la protesta por la inseguridad en el cierre de los Juegos Suramericanos, en la noche del domingo, encabezada por familiares y víctimas de episodios delictivos frente al Parque Independencia. “Estuvimos ahí cuando Javkin (el intendente de la ciudad) decía que Rosario es una Rosario de paz, es una vergüenza cuando están matando gente todos los días, no puede decir eso”, manifestó.

La abuela de Auriazul aseguró que se siente “defraudada” por los políticos y por la policía y denunció que en la marcha de las víctimas de la inseguridad fueron maltratados por los oficiales que mandaron a custodiarlos . "La policía nos decía ‘váyanse manga de negros, manga de narcos’. Estaban listos para reprimir. 'Le pregunté si era madre' y se nos burlaba la policia. No queríamos disturbios. Me mataron a mi hija, a mi yerno y a mi nieta", cerró. 

La despedida a Auri desde su jardín de infantes


La chica de 6 años que murió acribillada junto a sus padres el viernes a la noche en la zona sur fue despedida por sus "seños" en un emotivo mensaje público.

"Mucha tristeza, es algo que nos conmueve, la muerte de un niño no es algo que debería suceder y en Rosario está sucediendo muy seguido", dijo una de las maestras del jardín "El Sapo Pepe", donde iba la menor asesinada, este lunes en Cada Día (El Tres). 

"No lo podemos creer, es mucha la violencia que hay en la ciudad", agregó. "Era una nena hermosa en todos los sentidos, un amor de persona, muy educada ella y su mamá. Con los chicos no, es demasiado triste, no paramos de pensar en ella", sumó otra de las docentes que tenía contacto a diario con Auri. 

El fin de semana, desde el jardín la despidieron con un emotivo mensaje en sus redes sociales. "Gracias por dejarnos ser parte de tu vida, por tus abrazos cada día al llegar al jardín, por tus sonrisas, por tu amor y dulzura de cada día. Una niña tan hermosa en todos los sentidos", escribieron en su cuenta de Facebook.