Fabio Alejandro Giménez, el preso de la cárcel de Coronda que fue imputado hace dos semanas por ordenar extorsiones y balaceras, volvió a ser acusado por el mismo delito. Por si fuera poco, encima “chapeó” a la víctima con la nota que escribió Rosario3 sobre él. Es tan grave y repetitiva la situación del mismo recluso que la jueza Valeria Pedrana remitió una copia de la audiencia al Ministerio de Seguridad y al director del Servicio Penitenciario para que tomen intervenciones eficaces.

Por segunda vez en lo que va del mes, el fiscal de Balaceras Pablo Socca imputó a Giménez por usar un teléfono para extorsionar. En la audiencia que se hizo el 1º de junio, lo acusó por liderar una banda que se dedica a la venta de droga en Rosario y Villa Gobernador Gálvez, que también realiza balaceras, homicidios por encargo y chantaje.

En la audiencia de principios de junio, Socca le atribuyó varias extorsiones cometidas entre enero y febrero pasado contra un kiosco, una empresa de mudanzas y un comercio dedicado a la venta de repuesto automotor. Toda la acusación se desprende de allanamientos hechos a finales de mayo, que incluyeron la celda de Giménez.

Después de los allanamientos, y en la previa a la audiencia imputativa, Giménez siguió extorsionando. Es decir, en cuestión de horas consiguió teléfono para intimidar.

En este caso, lo hizo a una persona que le había alquilado un inmueble a su novia Samanta Vilches antes de ser arrestada. El preso le reclamaba 300 mil pesos porque supuestamente había “perdido sus cosas” en el allanamiento que se hizo en esa propiedad en busca de la mujer. 

La víctima accedió a pagar la extorsión para que no la baleen. Fue el 29 de mayo pasado, cuando dio 100 mil pesos. Pero para el recluso no era suficiente ese monto y se volvió a comunicar para exigir la entrega de una “segunda cuota”

Por ese motivo, el 30 de mayo se procedió a hacer una entrega controlada por orden del fiscal Pablo Lanza que culminó con varias personas detenidas en Villa Gobernador Gálvez, entre ellas la hija adolescente de Samanta Vilches y dos sospechosos que estaban abordo de un flete.

Por ese último hecho ahora fue imputado Fabio Giménez, a quien la jueza Pedrana le dio prisión preventiva efectiva por el término de ley. Los dos mayores de edad que iban en el flete para recibir el segundo pago de la víctima ya fueron acusados el 1º de junio y quedaron en libertad bajo reglas de conducta ante la falta de evidencia de que tenían conocimiento del destino que tenía el viaje que realizaban.