Legisladores del oficialismo trabajan en un proyecto para crear un impuesto sobre el patrimonio de los grandes grupos económicos. El presidente de la comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, Carlos Heller (Frente de Todos), evaluó sostuvo que es "la única salida para generar recursos extraordinarios" que tiene el Estado para afrontar la emergencia sanitaria y mitigar el avance de la pandemia de coronavirus.

En ese sentido, el presidente del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner, pidió estudiar las alternativas impositivas para poder dotar al Estado de recursos adicionales y encomendó esta tarea de redactar una propuesta a una de las principales espadas económicas de esa fuerza, el empresario y contador Heller.

La iniciativa, que se terminará de diseñar en el fin de semana, apunta a crear un impuesto extraordinario sobre el blanqueo de capitales, las ganancias de grandes grupos económicos de bancos, supermercados, laboratorios y compañías de seguros.

Esta idea se contrapone con la propuesta de Juntos por el Cambio de generar nuevos recursos para atender la pandemia con una rebaja del 30 por ciento de los sueldos altos en los tres poderes del Estado.

El presidente Alberto Fernández opinó que el proyecto del Frente de Todos tiene "una lógica mejor" que la rebaja de sueldos, debido a que apunta a que los aportes sean realizados por "los que más han ganado o los que más se beneficiaron con un blanqueo después de defraudar al Estado por no pagar impuestos".

En declaraciones a la agencia Télam, Heller dijo que se está "trabajando para tener hacia fines de la semana un proyecto que sirva de base para llevar adelante el debate necesario en la comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, primero, y en el recinto, después".

En ese sentido, explicó que la idea es que se "establezca un tributo extraordinario que tenga una asignación específica, es decir, orientado a resolver los problemas emergentes de esta crisis y para ayudar a los sectores más afectados".

Detalló que ese tributo se aplicará al "1 por ciento de la población con altos patrimonios: las grandes corporaciones, los bancos, las grandes compañías de seguros, los grandes laboratorios, las grandes cadenas de supermercados, entre otros".

"En ese universo incluimos a los fondos transparentados a través del último blanqueo", planteó.