Nos duele la cabeza, nos distraemos con facilidad y no podemos concentrarnos, perdemos creatividad y estamos siempre cansados. Muchos de estos problemas pueden ser síntomas del estrés que nos provoca estar tanto tiempo encerrados por el coronavirus.

Puede que los primeros días de cuarentena los hayas aprovechado para hacer cosas pendientes, ordenar, descansar, entre muchas otras tareas. Sin embargo con el correr de las semanas la mayoría fue perdiendo energía, ganas y más de uno la dieta. Para la psicóloga Alexis Rockley estas son consecuencias esperables de estar sometidos al estrés y la incertidumbre, y no fallos personales de los que debamos culparnos.

Estas son las conclusiones de Rockley, consignadas por el sitio Quo, sobre las causas de este comportamiento alterado:

“¿Te sientes dejado e inconsistente? Eso es porque tu cerebro está no sabe para qué noticias tendrá que hacerse a la idea en el futuro, o qué va a pasar el mes que viene. ¿Te cansas con facilidad? Es porque tu cerebro está consumiendo energía diez veces más rápido de lo normal a causa del estrés.

¿No te puedes concentrar? Es porque tu cerebro ha suspendido temporalmente algunas de las funciones de su cortex prefrontal. la parte que maneja las tareas complejas y la planificación, debido a la respuesta al estrés”, comenzó diciendo la profesional.

“¿Tienes un bloqueo creativo? Eso es porque tu cerebro ha desviado temporalmente toda su creatividad (es decir, la habilidad para resolver problemas) para ocuparse de '¿cómo evito morir?', entrando en un estado de luchar o huir, pero muy constreñido y a fuego lento, ¿De repente no te importan objetivos para el futuro, o los sueños que tenías antes? Es porque tu cerebro cree que fijarse en el corto plazo es la mejor forma de adaptarse ahora mismo. ¿Estás en una montaña rusa emocional? Tus planes, creatividad, energía, concentración y motivación ahora suben y bajan como un yoyo porque tu cerebro cree que lo que necesitas es ser extremadamente capaz de adaptarte”, aseveró la psicóloga.

Un relevamiento realizado por Rockley encontró que el 75% se ha sentido desmotivado, fácilmente distraído y bloqueado creativamente en los últimos 30 días; el 67% se siente como si estuviéramos en una montaña rusa emocional; el 63% se preocupa muy poco por todo lo que solíamos preocuparnos antes, nos aburrimos fácilmente y nos frustramos con nosotros mismos por estar aburridos; el 52% dijo que los objetivos que solían tener parecen ahora irrelevantes.

Frente a esta situación, propone tres soluciones:

Date tiempo: extendé los plazos de las cosas que antes te importaban, dejá que las cosas pasen más lentamente, también porque te sentirás mucho más cansado de lo normal. A lo mejor solo podés trabajar, cuidar de los tuyos y dormir, aceptá que no podés hacer mucho más.

Ajustá tus expectativas a la baja: todos esperamos ser capaces de hacer más, superarnos, pero tu cuerpo y tu cerebro están trabajando horas extras para mantenerte vivo y no volverte loco. Puede que pierdas la paciencia y metas la pata con más facilidad, aprendé a disculparte rápido.

Aprende primeros auxilios emocionales: en situaciones de estrés extremo, como accidentes, hay muchas técnicas diferentes que se pueden aplicar para ayudar a la gente a manejar los nervios. Respirar, meditar, dibujar, cualquier técnica es válida, lo importante es dedicarte un tiempo a hacerlo.