Si estás embarazada, sabrás que vestirse canchera y cómoda no siempre es tarea sencilla. A continuación te proponemos una serie de consejos para salir airosa de la situación.

- No compres ropa que después no vas a usar: el embarazo dura sólo unos meses, y hasta el quinto-sexto mes la panza no es muy grande, así que preferí usar lo que ya tenés, siempre y cuando te resulte cómodo.

- Buscá ropa en secciones que no sean prenatales, hay muchas prendas que te pueden servir aunque no sean propiamente para embarazadas: camisas oversize, pantalones con cintura elastizada y hasta vestidos con corte princesa.

- El negro estiliza: ¡Nunca lo olvides! Esta máxima del estilo se convertirá en un mandamiento durante el embarazo. Pero no olvides que los estampados coloridos le darán a tu outfit una onda particular.

- Encima de un look total en negro ponete chaquetas, kimonos o sacos de color que enmarquen la silueta.

- Utilizá muchos fulares y collares cortos con los que disimular los kilos de más y al mismo tiempo añadir un toque chic a tu vestuario.

- Los chalecos son una prenda genial para llevarlos abiertos, ya que recortan visualmente los costados.