La semana terminó cargada de noticias empresarias. Algunas de ellas alentadoras como las inversiones de u$s25 millones de Syngenta y de $480 millones de Corven, ambas en Venado. Pero otras muy desalentadoras como la crisis casi que atraviesan las fábricas de biodiesel santafesinas por la falta de actualización de precios y el cierre de comercios gastronómicos, algunos de ellos emblemáticos que no resistieron la pandemia. También hubo interesantes novedades en materia de negocios tecnológicos y financieros. Por ejemplo, un grupo de importantes bancos, como el Macro y el Santa Fe, presentaron Modo, que la billetera para competir con Mercado Pago. Y la Municipalidad de Rosario fue protagonista por partida doble: anunció una fuerte inversión para sumar 180 kilómetros de fibra óptica al tiempo que concretó una exitosa colocación de letras por $420M a tasa competitiva que le permite termina el año sin tanto apremio financiero. Rosario3 recorrió todos esos caminos y recogió mucho “run-run” de negocios. Acá va el top ten
1) Atónito. Así dijo sentirse un empresario del sector portuario al enterarse los sueldos que cobran los empleados del Ente Administrador del Puerto de Rosario (Enapro). Y no fue el único sorprendido. Rosario3 accedió a la auditoría sobre la anterior gestión del organismo que realizó la Sindicatura General de la Provincia de Santa Fe y allí salta que a los auditores también les llamó la atención lo elevado de algunos salarios. Según consta en el informe, quien más gana en el Enapro es el gerente de operaciones, que en noviembre tiene un ingreso remunerativo mensual de $468.422 (y un costo para el ente de $618.317). El gerente de administración tiene un ingreso remunerativo de $400.249 al mes (y un costo de $528.329 para el ente). Para tener una idea, el gobernador Omar Perotti cobra un sueldo bruto de $314.219. Los choferes del Enapro, en tanto, se llevan de bolsillo $138.748 al mes, el personal de Mesa de Entrada tiene un sueldo mensual remunerativo de $127.175 y los mozos cobran (después de los descuentos) $90.075. Y el asombro que tenía el empresario portuario sobre los sueldos viene a cuenta de que se enteró que ahora el gremio está pidiendo un aumento del 37%. Para tener una idea, ese aumento llevaría el sueldo remunerativo del gerente operativo a $628,884 y un costo mensual para el Enapro de $830.126, cifras que el ente portuario no convalidaría.
2) Los buenos salarios del Enapro pueden explicar el interés de los funcionarios políticos radicales que acompañaron a Ángel Elías durante los casi 12 años que estuvo al frente del ente para que los pasen a planta permanente ante del cambio de gobierno y con cargos gerenciales. Pero el debate que emerge es más profundo. Si el Enapro tiene tanta caja, ¿cómo puede ser que en los últimos 15 años no aportó ninguna obra de infraestructura al puerto? ¿Por qué no se arreglaron las calles internas o se hicieron obras logísticas complementarias? ¿Cómo no se usaron esos fondos para acomodar las tierras no concesionadas que incluso fueron intrusadas? ¿En qué se gastó la plata? Según el informe de la auditoria un gasto recurrente fue el de los viajes corporativos. Por ejemplo, en 2019 tres funcionarios del Enapro gastaron 150 mil dólares sólo en pasajes de avión.
3) Vuelta de página. “Orden de servicio”. Así se le dice en la jerga de las licitaciones de obras públicas a una suerte de multas que las dependencias oficiales le ponen a las contratistas por distintas razones: como retrasos en el arranque o falta de documentos. Resulta que a la constructora CRD, que esta año viene haciendo mucho ruido al quedarse con varias licitaciones para Aguas y el Ministerio de Infraestructura (como desagües) al ofrecer precios hasta 40% más bajos que los presupuestados, ya le llegaron varias “órdenes de servicios” instándola a ponerse en línea en varias de las obras más importante que consiguió pero que todavía no arrancó. Es que no aparecen las pólizas de seguro o la vestimenta para el personal y a la Provincia les urge que arranquen las tareas. El tema ya encendió la luz amarilla en la Uocra porque temen que haya problemas en pago de los aportes.
4) Ya que estamos en la construcción, desarrolladores de negocios inmobiliarios recibieron con satisfacción el Ok del Concejo a la iniciativa de la Municipalidad de construir en los edificios plantas bajas más altas y balcones más anchos. Pero van por más. La Asociación de Empresarios de la Vivienda (AEV) advirtió que la zona “Anillo Central”, es decir Oroño, Pellegrini y el río, quedó excluida de la posibilidad de ensanchar esos espacios. Es que la normativa aprobada contempla que se puede aumentar los balcones cuando la calle donde se construye el edificio tiene más de 17 metros entre líneas municipales a lo ancho, y salvo algunas excepciones como Corrientes y sólo en un pequeño tramo, en el resto no se podría agrandar porque no llega a esa medida. Para la AEV, esto genera una desigualdad muy marcada dentro de la ciudad.
5) Siguiendo con los desarrollos inmobiliarios, la Municipalidad -sin decirlo y mucho menos promocionarlo- parece decidida a ir desactivando algunos escollos que dejó el Código Urbano que heredó del socialismo y que le pone estrictos topes a las alturas de los edificios a construir. Y no es que vayan a armar un nuevo Código integral, que podría generar resistencias (hasta internas en el frente gobernante) y muchos debates, sino que prefieren ir haciendo modificaciones puntuales y parciales que puedan bajar el nivel de rechazo de los sectores políticos que suelen poner más escollo al avance inmobiliario. No en vano, tras impulsar la ampliación de los balcones y la altura de las plantas altas, ahora buscan introducir la posibilidad de que se pueda construir con más altura por calle Maipú desde Urquiza a Pellegrini. La idea, que se discutirá la semana próxima en una comisión que integran funcionarios, concejales y empresarios, es subir de 23 a 30 metros la altura permitida. Pero hay más: también buscan que en las peatonales Córdoba y San Martín la altura permitida suba de 23 a 31 en función de los edificios patrimoniales con los que cuente cada cuadra. El objetivo es presentar el paquete al Concejo antes de fin de año.
6) Otro tema. Recién esta semana la Corte Suprema de Santa Fe habilitó la realización de audiencias, ya sea de forma presencial o remota. Abogados laboralistas esperan que entonces se puedan empezar a mover los cientos de expedientes frenados en los que la Justicia debe dirimir conflictos entre empresarios y trabajadores. Y vaya que hay casos por resolver porque en pocas horas se programaron 300 audiencias y la Corte tuvo que extender horarios de trabajos en juzgados. Y como la apertura llega muy cerca de la feria judicial nadie prevé que para fin de año la mayoría de las causas laborales atrasadas hayan sido reactivadas, exponiendo así un gran déficit del servicio judicial. Un dato: se habilitó la realización de audiencias remotas pero los juzgados no tienen capacidad tecnológica (ni cámaras, ni micrófonos, ni wifi) así que, los que incurran por la vía digital, deberán usar sus propios equipos con todas las dudas que eso supone.
7) Una de industria. Fue muy comentado el esfuerzo semántico del presidente de la Federación de Industriales de Santa Fe (Fisfe), Víctor Sarmiento, de tocar un tema sensible en una tribuna sensible. ¿Qué tema? La disparada de precios de insumos estratégicos -como el acero- y la distorsión que eso provoca en el resto de la industria. Ocurre que si no se quiere sólo culpar a la inestabilidad cambiaria por esas subas y sí poner la lupa sobre las prácticas comerciales (por no decir la especulación) de las productoras del insumo básico, hacerlo en la cumbre de la UIA (adonde el grupo Techint, el principal productor de acero) talla mucho en el ritmo institucional, supone animarse a navegar aguas complejas. Y Sarmiento salió bien parado de su discurso desde la planta de Liliana en lo que fue el capítulo santafesino de la cumbre nacional de la UIA. “Tenemos problemas con insumos en la metalmecánica, por ejemplo en laminados y barras de hierro, que necesitamos acomodar. Y apelamos a la generosidad. Debemos tener generosidad en todo sentido y aspecto. Los fabricantes y distribuidores tienen que ser generosos y nosotros como industriales tampoco debemos cubrirnos comprando en exceso por sobre la capacidad de producción” propuso el industrial. Les habló el corazón. ¿Como le responderán los dueños del acero?
8) Muy caliente está el mercado de granos y por eso le damos los tres últimos puntos. Y no por el precio de la soja, que terminó en baja. La decisión del gobierno nacional de sacar del mercado a la agroexportadora Díaz y Forti (lo bajó de registro de operadores y le quitó licencias para exportar) por incumplimientos en las liquidaciones de exportaciones (el Banco Central dice hay atrasos por u$s450 millones y la empresa asegura que es por la mitad de esa cifra) tuvo en todas las charlas de operadores un registro totalmente político. Es que nadie duda de que más allá de la necesidad económica del gobierno de apurar ingreso de dólares, de las dudas sobre el origen del financiamiento de Díaz y Forti y de lo bien que le viene a los traders multinacionales que lo corran porque les estaba compitiendo duro, el objetivo central es político, se dispara en la Casa Rosada y apunta, en realidad, a Vicentin. Es que sin los ingresos por los contratos a fazón con Díaz y Forti, la que está en problemas es Vicentin ya que no es lo mismo gestionar su crisis con las plantas paradas y los obreros en la calle. Claramente, desde la Casa Rosada disparan contra Díaz y Forti (tienen dudas sobre si no hay “vicentines” en las sombras o que sea el fronting de personajes de la política que no quieren adentro de un mercado tan estratégico) para bajarlo de la competencia por Vicentin. Pero si lo que quieren es bajarlo, se dispara automáticamente la pregunta: ¿Con quién lo quieren reemplazar en la Casa Rosada? ¿Hay candidato oficial?
9) Cómo a la delicada situación de Díaz y Forti se sumó la muy tardía decisión del juez que lleva la convocatoria de Vicentin, Fabían Lorenzini, de intervenir la empresa (que parece más un intento de protegerse), se armó un debate ahora entre acreedores sobre qué escenario les conviene. ¿Que la empresa deje de operar y se pudra todo o que siga trabajando como hasta ahora? Los abogados suelen inclinarse por la primera argumentando que así los dueños se quedan ya sin margen para dilatar su retirada y entregan las llaves más rápido y sin vueltas. En cambio, en ACA (principal acreedor) -y el flamante interventor Andrés Shocron, que fue propuesto por la cooperativa- son más propensos a que haya una negociación con las plantas trabajando. En lo que todos coinciden es que, por uno u otro camino, la salida recién llegará cuándo los dueños se decidan de una vez a retirarse y a muy bajo costo porque la empresa debe u$s1.400 millones. El nuevo directorio, como ya se dijo, está convocando a una “mesa de reestructuración” asegurando que quiere vender (pero no toda) Vicentin Saic. Pero ¿los bancos extranjeros se pueden sentar a negociar con quienes denunciaron por estafa y sin que les expliquen qué pasó con los u$s500 millones que le prestaron? Acreedores comerciales dicen que aceptan reunirse siempre y cuando haya un proyecto de reestructuración en serio (y acorde a la realidad), pero por ahora ven que lo único que hace Vicentin es hablar sin concretar, prometer y dilatar. ¿Quién quiere verse involucrado en un comité de reestructuración con una empresa con denuncias penales, sin proyecto en concreto, sin explicación satisfactoria de lo ocurrido y sin que aparezca quién pone la plata? El “comité de reestructuración” así como está no seduce mucho.
10) Mientras escala la tensión en el caso Vicentin, fue muy comentado lo tranquilo que se lo vio la semana pasada a Alberto Padoán, de una de las familias más importantes de Vicentin, cenando muy relajado y como si nada en un conocido restaurante del norte santafesino. Es más, se comenta en el norte que su empresa agropecuaria “Los Amores”, que tiene junto con sus hijos, está en plena expansión. “Los Amores”, con unas 6,000 hectáreas en el oeste santafesino, al norte de Tostado, en la que siembran algodón con desmotadora incluida. Allegados a la familia cuentan que ahora están hasta levantando una pequeña fábrica de aceite de extracción por prensa y que tiene varias inversiones, algunas importantes, en marcha. Parece que fondos no le faltan.
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