Las instituciones de la sociedad civil -empresarias, profesionales, sociales, cooperativas- son un importante activo que tiene la ciudad para superar todos los escollos que afronta. Y por eso su vigencia merece celebrarse por más que la situación social esté tensa, como ocurrió el jueves por la noche en el acto por el 139 aniversario de la Bolsa de Comercio de Rosario.

En efecto, al evento (que tuvo su parte formal en el Edificio Torre) asistieron unas 800 personas y se convirtió en el lugar de encuentro de los principales referentes empresarios y políticos de la región. Y no sólo del ambiente cerealista, sino que hubo presencia de los distintos sectores productivos de la región. Incluso, asistieron importantes funcionarios del ámbito judicial, como el presidente de la Corte, Daniel Erbetta, y universitario, como el rector Franco Bartolacci.

“Dejen de lado egos personales y miradas mezquinas", le pidió a la clase política el presidente de la Bolsa, Miguel Simioni, en su discurso. Y es que el centro de su mensaje estuvo en reclamarle a la política que se ordene “de manera tal que nos permitieran construir una visión de futuro que nos incluyera a todos”. Y agregó: “Hoy, miramos con asombro como pareciera que se está perdiendo hasta la capacidad de escucharnos y debatir. Y esto duele aún más, porque los argentinos tenemos sobrados ejemplos de lo que podemos lograr cuando nos unimos en torno a una causa que nos permite trascender nuestras diferencias”.

En ese sentido, la Bolsa buscó predicar con el ejemplo su llamado a la construcción de consensos en lugar de buscar imponerse en base al choque frontal. A diferencia de los tiempos de Alberto Padóan (Vicentin) conduciendo la entidad y convirtiéndola en punta de lanza del PRO, la nueva gestión buscó que estén representadas y cómodas todas las fuerzas políticas. La invitación al acto al candidato a intendente Juan Monteverde, de ideas abiertamente críticas sobre la agroindustria, fue un ejemplo. Los lazos con la UNR, cuando tradicionalmente la entidad se sentía más cómoda con universidades privadas, y la empatía con los problemas que tiene la sociedad haciendo suyo en el discurso el reclamo por seguridad y paz social, son otros ejemplos.

Y en esa línea de tender puentes y no mirarse el ombligo, Simioni no sólo valoró y reconoció a los históricos dirigentes y socios de la Bolsa, como es usual en los actos de la entidad, sino también a los dirigentes de otros sectores, como el comercio, haciendo un reconocimiento a Elías Soso, y la industria, homenajeando a Franklin Boglich, en lo que fue uno de los momentos más emotivos del acto formal con la presencia de ambos empresarios durante el acto.

Hablando del acto, la cita era para las 18.30 pero la demora en llegar del gobernador demoró su inicio. Omar Perotti llegó a las 20, un retaso que generó muchos ceños fruncidos en los socios de la Bolsa. Y pese a la queja de los socios que pedían que el acto arranque sin el gobernador (demora que obligó a no pocos asistentes a retirarse ya que a las 20 tenían pensado irse pero a esa hora todavía el acto no había iniciado) y a que el propio Perotti al avisar de su demora sugirió que empiecen sin él, igual Simioni prefirió esperar.

Y lo hizo con un doble objetivo: primero como gesto a Perotti por asistir al evento (y en el discurso lo hizo público ya que, comentó, que al igual que Javkin siempre dieron la cara, pese a que en muchos temas la Bolsa los criticó a ambos) y también para mostrar la ausencia del gobierno nacional. “Hay una silla vacía”, dijo en el acto. Además, se mostró molesto por la preferencia de los funcionarios nacionales “por los sets televisivos de Buenos Aires en lugar de escuchar al interior productivo”. Y es que además de los cerealistas rosarinos, al acto asistieron los presidentes de todas las Bolsas del interior, lo que le dio un caracter bien federal al encuentro agroindustrial.

En efecto, pese a estar todos invitados no asistieron los altos funcionarios que usualmente tienen contacto con la entidad, como el secretario de Agricultura, José Bahilo, ausente sin argumento. El caso del ministro de Transporte de la Nación, Diego Giuliano, fue distinto ya que ayer mismo aterrizó de Asunción adonde había participado en misión por un tema clave para el sector, como es el de la tensa discusión por las tarifas de la hidrovía con el gobierno paraguayo. Incluso, la segunda de Giuliano estuvo en el acto y se mostró muy molesta por la referencia de Simioni a la ausencia de referentes nacionales. Y hasta se lo hizo saber a quienes tenía a su lado en la platea, como al titular de la Corte.

El reclamo de la “silla vacía” también fue para los candidatos a presidente, sobre todo a Patricia Bullrich y a Sergio Massa ya que con Javier Milei los contactos no están bien afinados y no pasan de la formalidad. Precisamente, antes del acto, los presidentes de todas las Bolsas cerealeras del país (Córdoba, Bahía Blanca, Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos, etc.) tuvieron su propia cumbre y allí compartieron las dificultades que encuentran para poder reunirse con los candidatos presidenciales y quedaron en tratar de gestionar a varias puntas reuniones a las que luego participar al resto para hacerlas conjuntas.

Sobre el acto, resta decir que la extensión del discurso de Perotti -habló bastante más de media hora (lo que lo cronometraron dijeron que fueron 55 minutos)- no fue de lo mejor recibido por la platea, luego de las dos horas de retraso en llegar. Es más, muchos asistenes se fueron apena terminó de hablar Simioni. En parte, porque después de las nueve cierran todas las cocheras del centro.

Y luego, en el coctail, los empresarios tomaron distancia del énfasis que puso sobre la inversión en caminos rurales que hizo la Provincia, ya que sin dudar de los datos oficiales sólo se escucharon quejas muy duras del agro por el estado de los mismos. "Si la inversión en caminos rurales está, en el sur de Santa Fe no se ve", se escuchó. Sin contar caminos rurales, Santa Fe tiene una red vial de 10.000 kilómetros; así que claramente los 1.200 que contó Perotti que intervinieron tuvieron sabor a muy poco.

Y ya que nos metímos en el coctail, que se realizó en el hall central de la entidad, vamos ahora al “run run” de las mesas:

El lobby del Edificio Torre de la Bolsa, a full

x) ¿Milei gana en primera o en el balotaje? Ese fue el principal debate en las charlas del coctail posterior al acto. Si bien no hubo mucho voto cantado y confeso en favor del “león libertario” (es más se escucharon voces de preocupación por el tenor de sus propuestas) quedó claro qué lectura hacen en el establishment regional sobre el resultado electoral que se viene al calor del descontento popular. 

x) La figura de Bullrich, en tanto, quedó desdibujada en el círculo cerealista. Los balbuceos, las contradicciones y la falta de precisiones sobre su política para las retenciones que mostró esta semana en una charla en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, cuya intervención se viralizó en los grupos de whatsapp del campo, fueron de lo más conversado y satirizado anoche cuando se analizaba el estado de Juntos por el Cambio tras el revés electoral. Sólo se lo vio a Gerardo Bongiovanni, titular de la Fundación Libertad, militando el voto a Bullrich, quien lleva a su sobrino como candidato a diputado nacional. Pero esa no fue, precisamente, la actitud que más en soledad lo dejó: es que fue de los pocos que criticó a la Bolsa de Comercio por haber invitado a Monteverde.

x) ¿Y Massa? El ministro claramente no cosechó apoyos y respaldos electorales en el círculo rojo, salvo por los referentes de la industria (metalmecánica y metalúrgica) que asistieron al evento de la Bolsa. Se pudo ver que buena parte del voto “moderado” a Rodríguez Larreta quedó huérfano, pero reticente de buscar refugio en Massa.

x) Ya dijimos que no pasó desapercibida la ausencia del secretario de Agricultura de la Nación, Juan José Bahilo, el principal interlocutor político que el sector tiene con la Casa Rosada. “No vino porque sabía que en Rosario iba a tener una platea desfavorable ya que, a diferencia del encuentro de Coningaro -al que si fue el miércoles en Buenos Aires- acá no hay cooperativas que se la hagan fácil por miedo a perder el financiamiento que les pone el Estado”, disparó un enojado acopiador conocido por sus críticas a la competencia desleal que para el sector, entiende, representa la excepción del pago del Impuestos a las Ganancias que tienen las grandes cooperativas. Pero hay más: en el ambiente cerealero quedaron muy molestos con el secretario porque todavía recuerdan que había asegurado de manera terminante que el gobierno no iba a implementar un dólar diferencial para el maíz y al otro día Masas lo anunció. “Si se sale un dólar maíz renunció; es totalmente distorsivo”, dicen que dijo y un importante corredor de granos que lo escuchó comentó que todavía espera que cumpla lo prometido.

x) En la reunión de presidentes de las Bolsas cerealeras, a la que se hizo referencia antes, otro tema de conversación fue la preocupación porque las anunciadas lluvias no llegan, y en caso de no hacerlo pronto empezarán a complicar el trigo. En zonas, como el sur bonaerense, el agua alcanza para el cereal pero no hay perfil hídrico suficiente para la gruesa, mientras que en territorio santafesino (sobre todo en el norte) la situación empieza a ser angustiante. “Una nueva sequía como la de esta campaña sería catastrófico”, apuntan. Todavía hay tiempo y confianza en los pronósticos, pero claramente empezó el nerviosismo.

x) Además se comentó mucho la versión de un nuevo tipo de cambio diferencial para la soja, al que se le pronosticó poca efectivdad. Ya que, tras hacer caja al vender el maíz con el dólar agro, y con tener que esperar sólo cuatro meses para el cambio de gobierno, el productor no parece necesitado de vender la soja guardada. Incluso, el debate era sobre de cuánto sería el salto devaluatorio de acá a fin de año y los pronósticos iban del 30 a 50 por ciento.

x) Otro tema muy conversado en la noche fue la sorpresa que causó las diametralmente opuestas declaraciones de los gobiernos argentino y paraguayo sobre la reunión cumbre en Asunción por la hidrovía. Es que ayer por la tarde, mientras que el canciller paraguayo dijo que Argentina se comprometió a dejar de cobrar el peaje por el tramo Santa Fe al norte (que usan casi exclusivamente embarcaciones de bandera paraguaya) a la espera de que en 60/90 días se logre un entendimiento de cómo costear las obras de acondicionamiento de la vía navegable, el ministro de Transporte argentino, Diego Giuliano, anunció que -por el contrario- el peaje se sigue cobrando firme durante el análisis de una “propuesta superadora”. Entre los empresarios no salían del asombro por lo radicalmente opuesto de los comunicados y el objetivo de informar algo que no es cierto. Y el intento era buscar que no siga escalando el diferendo diplomático por los peajes buscando mantener abiertos puentes de contacto entre uno y otro gobierno, ya que la molestia del gobierno argentino por las declaraciones de los paraguayos era profunda y lo que está en el medio es el tránsito de barcazas con granos con destinos a las aceiteras de la zona.

x) Otra de logística. Si bien el paro de los transportistas autoconvocados no tuvo adhesión, los acopios sí comentaban que no están queriendo tomar servicios porque, tras la devaluación, trabajan a pérdida. Anoche se comentaba que, en breve, los transportistas de cargas agrícolas actualizan sus tarifas un 22% post devaluación, cuando la última actualización había sido el 20/7/23. 

x) Sobre finanzas, un comentario recurrente es las charlas fue la preocupación por la frecuencia con la que se están produciendo defaults de financieras, siendo el último caso lo ocurrido con la Fintech porteña Wenance, cuya caída pegó fuerte en Rosario. Y, en ese sentido, se comentaba de que hace unos días que no aparece por su oficina un financista con base en Puerto Norte que era requerido por su clientela ante las demoras en devolver dinero que le habían dado para que se los trabaje. Mucho se debatió y un tema central que se charló es el riesgo que supone para una ciudadanía (sin distinción de segmento social) con escasa “educación financiera” tener muy a mano (vía el celular) la posibilidad de hacer en el acto y de manera online cualquier tipo de inversión financiera. Y se debatió sobre si la Comisión Nacional de Valores (CNV), que controla lo ocurrido en el mercado institucional formal y regulado, no debería salirse un poco de sus funciones estrictas e impulsar también que haya revisiones oficiales sobre lo que ocurre en todo el mercado financiero. Por ejemplo, mejores campañas y políticas de educación financiera, porque el tema central a entender para el ahorrista/inversor es el riesgo que supone (sobre todo para un minorista) entregar su dinero para que lo “trabaje” un tercero. Y es que no se trata de un comisionista que recomienda y opera un negocio pero a cuenta y orden del cliente sino que, en estos casos, se entrega la titularidad del dinero a cambio de una renta.

x) Finalmente, un tema que fue muy resaltado favorablemente en el coctail fue el video que presentó la Bolsa durante el acto figurando noticieros televisivos y radiales en los que se anunciaban las buenas noticias que a todos les gustaría escuchar y que, “si la política se ordena”, están al alcance: desde ciudades que no colapsan vialmente cuando llega la cosecha, a récords de nuevas empresas tecnológicas fundadas o a barcos de mayor porte transitando por el río.