Luego de la suspensión por cuatro fechas que le aplicó la FIFA, el capitán de la selección argentina Lionel Messi negó en forma terminante haber insultado al juez de línea brasileño Dawson Silva y dijo que en realidad maldijo "al aire". Fue en una carta que envió a la entidad rectora del fútbol mundial, con el objetivo de que levanten o al menos morigeren la sanción que lo dejó afuera del partido con Bolivia y le hará perder los tres que siguen de una Eliminatoria que asoma complicada para el equipo nacional. 

Messi negó "haber ofendido al árbitro asistente" en el partido frente a Chile, y consideró que su conducta "no encuadra dentro del Código Disciplinario" del organismo rector del fútbol mundial. 

Agrega en el escrito que "el asistente de nacionalidad brasileña entendía perfectamente lo que decía. A tal punto que conversamos de manera amigable, sin que en ningún momento mis dichos lo hayan ofendido o injuriado”.


"Jamás fueron destinadas a su persona, sino que fueron dichos al aire, y desde ya pido disculpas por ello. Los videos que se acompañan no demuestran que haya existido una ofensa", indicó la Pulga, en el descargo al que tuvo acceso el diario Olé.

AFA presentará su reclamo este viernes ante la Comisión de Apelaciones de FIFA, con el acento puesto en que el juez de línea comprendió lo que el futbolista argentino expresaba y aún así decidió no informarlo.