Si algo le faltaba a la crisis deportiva e institucional que atraviesa Newell’s era terminar el año con medidas de fuerza de los futbolistas y el resto de los empleados del club por un atraso salarial. El equipo logró la permanencia el fin de semana pasado, pero tras el alivio estalló hacia afuera el conflicto del plantel con la gestión del presidente Ignacio Astore, que a mediados de diciembre dejará el cargo luego de las elecciones. 

La Lepra regresó a las prácticas "a medias" el miércoles, luego de la medida de fuerza que llevó a adelante durante el martes que implicó no entrenar. La dirigencia habría abonado un porcentaje de lo que le debían a los futbolistas. Según trascendió, los jóvenes cobraron septiembre, pero los más grandes solo parte de agosto.

El presidente de Newell's, Ignacio Astore. (Alan Monzón/Rosario3)

Bajo este contexto, todavía no estaba confirmado que los jugadores vuelvan a practicar este jueves con normalidad a las órdenes del técnico interino Lucas Bernardi, aunque fuentes de la dirigencia deslizaron que lo harían. A media mañana, desde el club lo confirmaron.

Tampoco si el entrenador podrá contar con todos los integrantes del plantel para la última fecha. Por ejemplo, en las últimas horas trascendió que Gonzalo Maroni, a quien se le termina el préstamo en diciembre, ya no jugará este año. Antes, se tomó la decisión de rescindir el contrato de Darío Benedetto.

A su vez, los empleados nucleados en Utedyc lanzaron un paro de 72 horas a partir del viernes 14 con una movilización frente a la puerta del club ese día a las 15. Como la Lepra juega el domingo ante Racing en el Coloso, se generan dudas en torno a la organización del partido si continúa la media. 

El anuncio de la medida de fuerza de los trabajadores de Newell's nucleados en Utedyc.

Al menos eso plantean desde el gremio, pero lo cierto es que se encuentran en medio de las negociaciones con la dirigencia rojinegra para intentar llegar a un acuerdo y destrabar el conflicto antes del domingo. 

De cualquier modo, desde el Ministerio de Seguridad de Santa Fe le indicaron a Rosario3 que sería posible abrir el Coloso y garantizar la logística necesaria para que se juegue pese al paro de los trabajadores. 

“El operativo está dispuesto del mismo modo, deberíamos articular más con el municipio para regular el ingreso de la gente que ingrese al estadio”, deslizaron fuentes de la cartera sobre el encuentro de Newell’s frente a la Academia, programado para el domingo a las 20.15 en el Parque Independencia.

Deuda, reclamo y paro 


La deuda se extiende a los empleados del club de diversas áreas. Por ello, los integrantes del plantel tomaron esa medida, aunque se hicieron presentes en el predio Jorge Griffa el miércoles tras parar durante 24 horas.

Los más afectados del plantel eran los más jóvenes, quienes cobran sus primeros salarios como profesionales. Aunque el malestar ya cursaba varios meses, entre todos decidieron tomar esa medida recién cuándo el trance de la pelea por quedarse en la máxima categoría estuviera saldado. 

Según se supo, este miércoles impactó el pago en los más chicos, a quiénes se les habría abonado hasta septiembre. Sin embargo, los mayores solo cobraron una parte de agosto. Se habían acumulado tres meses. Desde la eliminación de la Copa Argentina que no percibían su salario.

Según pudo averiguar Rosario3, hasta el mediodía del miércoles los técnicos de las divisiones inferiores seguían sin cobrar su sueldo, al igual que los que trabajan con las infantiles en la Escuela Malvinas.

Este martes se había hecho público un mensaje en las redes sociales del capitán Éver Banega, en el que se daba cuenta de la situación: "En todo este tiempo hemos priorizado el interés superior de la entidad debido a la situación futbolística, pese al padecimiento de los integrantes más jóvenes que desde hace un tiempo están en un estado de vulnerabilidad económica por no percibir sus haberes", decía el comunicado.