Rosario Central tuvo un sábado de pesadilla y perdió por 2 a 1 con Godoy Cruz de Mendoza, por la fecha 18ª del torneo de primera división. Los canallas atravesaron por situaciones adversas incluso antes de iniciarse el pleito, como la insólita lesión de Ortigoza que le impidió debutar estando ya en cancha, y perdieron con justicia ante un adversario inteligente y contundente.

Los mendocinos se impusieron por los goles de Garro a los 14 minutos de juego y de Pol Fernández a los 15' del complemento, mientras que a segundos del final descontó Germán Herrera, aunque ese golpe ni siquiera alcanzó para transformarse en un envión anímico.

Como incidencia saliente, a los 32' minutos del primer acto vio la roja directa Fernando Tobio: fue su segunda expulsión en Superliga y tercera en su estadía en Central. Antes lo habían echado con Godoy Cruz por Copa Argentina y ante San Martín de San Juan por este mismo torneo.



La decisión de Ortigoza de no iniciar el cotejo pese a haber salido a la cancha dentro de los once (sufrió una molestia) modificó el plan de juego pergeñado en la semana por Fernández, que mandó al campo a Carrizo (aunque mantuvo los tres cambios, porque el Gordo salió antes de que Echenique pitara). El ex San Lorenzo se fue silbado.

El elenco cuyano fue más desde el comienzo mismo y pegó rápidamente: a los 14', García le sirvió un centro bajo a Garro desde la derecha y el de Tunuyán definió bajo las piernas de Ledesma. Central nunca pareció hacer pie, lució inconexo de mitad de cancha hacia adelante y débil en el retroceso. Sólo contó con un par de aproximaciones al arco de Burián, pero nada como para ilusionarse.

Ni que hablar luego de la roja a Tobio, que imprudentemente dejó una pierna arriba y vio una nueva roja en su paso por la Academia. Más problemas para Leo, que a la media hora tuvo que sacar a Lioi y poner a Cabezas para rearmar la defensa.

En el complemento, Godoy Cruz manejó los tiempos y volvió a castigar: al cuarto de hora, Pol Fernández disparó desde la puerta del área grande, su remate se desvió en el colombiano Cabezas y se clavó en el palo derecho del golero auriazul. El 2 a 0 fue demasiado para un equipo deshilachado y sin fuerza para descontar.

El descuento centralista recién llegó en el último suspiro y producto de una llegada aislada: el ingresado Germán Herrera desparramó al arquero rival y puso el 1-2, pero segundos después del saque del medio, Echenique lo terminó. Fue una victoria legítima del elenco visitante.

El Bodeguero venía de tres cotejos sin victorias fuera de su reducto, mientras que Central perdió por primera vez en Arroyito en el ciclo Fernández. Es más, nunca le habían convertido en esta era y hacía 412 minutos que no la buscaban adentro del arco propio. Además, frenaron la marcha luego de cuatro partidos invictos y cuatro éxitos seguidos en casa.

Ahora, Central quedó en el puesto 16º de la tabla de posiciones con 24 unidades. Por su parte, el Tomba se puso cuarto 31 puntos, a 12 del líder Boca.