La edición 2022 del Grand Slam de Wimbledon quedará en la historia y será recordada por no entregar puntos a los tenistas y por la prohibición de jugar para rusos y bielorrusos, daño colateral por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. Este sábado Elena Rybakina, nacida en Moscú, se consagró campeona en el torneo femenino tras vencer a la tunecina Ons Jabeur por 3-6, 6-2 y 6-2.

Rybakina, ubicada en el puesto 23º del ranking mundial de la WTA, empleó 1 hora y 50 minutos para doblegar a Jabeur (2º) en la cancha central del All England Club londinense.

La tenista nacida en Moscú hace 23 años conquistó su primer título de Grand Slam dentro de una carrera con muchos altibajos. De hecho, antes de su consagración en Wimbledon sólo había alzado dos veces un trofeo en el circuito, en Bucarest 2019 y Hobart 2020.

Por qué Rybakina pudo jugar


Grandes estrellas rusas como Daniil Medvedev, Andrey Rublev, Karen Khachanov, Victoria Azarenka, Aslan Karatsev, Daria Kasatkina y Aryna Sabalenka, entre otras, se quedaron sin poder jugar el torneo por la prohibición impuesta en Wimbledon. 

Sin embargo, si bien Rybakina nació en Moscú en 1999, en 2018 decidió nacionalizarse por Kazajistán a cambio de apoyo económico y de representar a ese país en el ámbito deportivo. Por eso pudo sortear la barrera y jugar en Londres. 

La flamante campeona de Wimbledon con el trofeo. (@wimbledon)

Se formó en el Spartak Tennis Club, el mismo en el que se entrenaron campeones de Grand Slam como Marat Safin, Yevgeny Kafelnikov y Anastasia Myskina.

Rybakina representó a Rusia a nivel de juniors, con presencia en los Grand Slams, y también en sus inicios en el circuito profesional de la WTA e ITF, hasta que a mediados de 2018 cuando ya estaba en el top 200 del ranking mundial decidió adquirir la ciudadanía kazaja.