Central y Boca juegan este domingo a la tarde el gran partido de la octava fecha del Torneo Clausura 2025, que además de lo que representa deportivamente para cada equipo, tiene el condimento extra de marcar el regreso de Miguel Ángel Russo al Gigante de Arroyito y el reencuentro del extécnico canalla con los hinchas y con gran parte del plantel que condujo hasta mediados de 2024. 

El punto máximo de emoción se dio cuando el entrenador salió por el túnel y pisó el campo de juego: ovación desde los cuatro costados de las 50 mil almas que coparon el estadio y un afectuoso saludo de Ariel Holan y cada uno de los futbolistas del plantel auriazul.

     
     

El cariño de los simpatizantes auriazules hacia el ídolo del club, que fue campeón como DT de la Copa de la Liga 2023 y, entre otros logros, se erigió como el artífice del ascenso a Primera División en 2013, en uno de los peores momentos de la historia de la institución, se empezó a sentir en las calles desde el sábado, cuando el plantel xeneize llegó a un hotel céntrico para quedar concentrado. 

     

Eso se replicó durante las horas posteriores. Este domingo, cuando Russo salió del hotel para subirse al micro que luego lo llevó hasta Arroyito, un numeroso grupo de hinchas lo recibió en la vereda con cánticos, mensajes de apoyo y muchísimo cariño. Lo mismo ocurrió cuando Miguel puso un pie en el playón del Gigante, para emprender la caminata hacia los vestuarios que tan bien conoce, entre aplausos y agradecimientos.

La previa estuvo marcada por la incertidumbre debido a la salud de su entrenador. La internación de Russo a causa de una infección urinaria abrió todo tipo de especulaciones, pero el campeón con Central en 2023 finalmente pisa el Gigante otra vez, en una tarde que será emotiva para el DT, los jugadores y los hinchas.