La lesión de Giovani Lo Celso, que se confirmó como un desprendimiento muscular, lo deja casi afuera de la lista de la selección argentina para la Copa del Mundo, a 16 días del comienzo de Qatar 2022. "No voy a llevar a ningún jugador que esté tocado y no se encuentre disponible ya para el primer partido del Mundial", confió el técnico, Lionel Scaloni, en las últimas horas.

Las perspectivas para el rosarino no son buenas. Es que el desgarro inicial que parecía no revestir otra consecuencia que las tres semanas de recuperación –o un poco menos– que suele demandar ese tipo de lesiones, luego derivó en un desprendimiento en la inserción del músculo en el bíceps femoral de la pierna derecha.

Los próximos pasos para la recuperación del volante de Villarreal, de España, cuyo pase es propiedad del Tottenham, serán decisivos porque el jugador no quiere operarse. Lo Celso ya avisó que no pretende otra cosa que realizar un tratamiento de rehabilitación como última, y única opción a la que se aferra para llegar al Mundial. 

El volante de la Roma está realizando trabajos diarios de recuperación que le demandan unas cinco horas y ya lleva más de tres semanas desde que se lesionó.