Con la llegada de la primavera, muchos rosarinos vuelven a sorprenderse con un fenómeno que se repite en plazas, parques y bulevares: las tipas que “lloran”. Las gotas pegajosas, a veces con un leve tono rojizo, caen desde las copas y manchan autos, veredas y mobiliario urbano. Pero lejos de ser una enfermedad o un daño estructural del árbol, se trata de un proceso natural explicado por la presencia de un pequeño insecto.

La ingeniera agrónoma Ángela Villademoros detalló en Cada Día (El Tres), que esta “lluvia” se genera por la acción de una chicharrita típica de las tipas. Se trata de un insecto llamado científicamente Cephisus siccifolius, más conocido como “chicharrita de la espuma”.

Es savia de los árboles. Se da periódicamente todos los años porque aparece de nuevo este insecto que es típico en estos árboles”, señaló.

El ciclo comienza cuando el árbol está brotando. “El adulto que ha puesto sus huevos, eclosionan y las ninfas, que son los bebés de esta chicharrita, empiezan a succionar y chupar la savia. Pero como chupan más savia de la que realmente utilizan, una parte la expelen”, explicó.

La especialista agregó que esta especie tiene una característica muy particular: “Por eso se llaman «de la espuma». Generan alrededor de su cuerpo una especie de espuma que envuelve a todas esas crías como protección. Cuando la espuma es muy abundante, empieza a gotear. Eso es lo que llamamos «la lluvia o el llanto de las tipas»”.

Ese goteo, a veces, deja manchas sobre autos y superficies debido a la tonalidad rojiza de la savia. Sin embargo, Villademoros remarcó que se trata de un fenómeno temporal y natural. “Como son seres vivos, depende de factores como la lluvia y la temperatura”, dijo.

Aunque pueda resultar molesto para quienes transitan o estacionan bajo estas arboledas, los especialistas insisten en que no representa un riesgo para los árboles y forma parte de su ciclo anual.