La Justicia condenó este jueves a los policías Alejandro Bustos y Leonel Mendoza a la pena de prisión perpetua por la persecución seguida de homicidio de David Campos y Emanuel Medina, ocurrida el 23 de junio de 2017. Tras conocerse la decisión, el fiscal de la causa, Adrián Spelta, se mostró conforme y aseguró que si bien pudo probar el accionar policial, aún no le encuentra explicación.
“Es difícil encontrarle un motivo a semejante agresión, cualquier respuesta que dé me va a quedar incompleta”, sostuvo el jefe de la unidad de Homicidios de la Fiscalía, a la salida del Centro de Justicia Penal.
Para el fiscal, los jueces avalaron la teoría de que tanto David Campos como Emanuel Medina no estaban armados y por ende no enfrentaron a ningún efectivo policial.
“Todo lo que se pergeñó a partir de lo que nosotros llamamos protocolo de encubrimiento que comenzó inmediatamente después de que sucedió el homicidio”, explicó Spelta. Según pudo demostrar durante la investigación, tras el asesinato, se eliminaron rastros del delito, “disminuyeron el poder ofensivo de la policía, desaparecieron vainas, puntas de proyectiles”.
Por este “protocolo de encubrimiento”, como lo denominó, la Justicia condenó a otros 17 policías a distintas penas por ser cómplices en e. encubrimiento de la escena del crimen.
Pretendía justificar algo que ni siquiera así era justificable, que era colocar armas o adulterar los rastros de pólvora en el dermotest positivo. Esas circunstancias se fueron acreditando a lo largo del juicio”, explicó.
Cabe destacar que, de las 17 condenas por encubrimiento, la Justicia dispuso que quienes ocupaban cargos de jefe dentro de la fuerza policial deberán cumplir con la prisión efectiva. En tanto que los demás funcionarios policiales que encubrieron y no denunciaron el hecho recibieron penas de cumplimiento condicional y quedaron expulsados de la fuerza.
Con respecto al motivo por el que Alejandro Bustos y Leonel Mendoza acribillaron a los dos ocupantes del vehículo, Spelta señaló que es algo difícil de comprender. “Eran policías que venían de realizar una persecución y al final, sin que estas personas hayan realizado ningún tipo de reacción, uno de ellos haya recibido 10 disparos y 3 disparos la otra víctima; es una pregunta que tratamos de contestarnos. Pero la verdad, es una duda que vamos a sostener”, concluyó.
