Un verdadero drama escolar sacude a la ciudad de Eldorado, Misiones, luego que una mujer fuera denunciada por desaparecer con el dinero de la fiesta de egresados de su hija y de otros 34 alumnos.
La suma, que rondaría los 17 millones de pesos, había sido reunida durante todo el año, pero horas antes del evento los padres descubrieron que no había catering, DJ, sonido ni iluminación: solo estaba paga la seña del salón. La encargada de administrar el fondo común, identificada como Romina E., quedó en el centro del escándalo.
La situación explotó cuando la propia mujer confesó en un mensaje de WhatsApp que el dinero ya no estaba.
“No hay justificación para lo que hice. Pensando que lo iba a recuperar, me fui enterrando cada vez más”, escribió, dejando en shock a las familias.
Tras ese mensaje, abandonó los grupos y desapareció, por lo que ahora es intensamente buscada por la Policía de Misiones.
De manera extraoficial, trascendió que padecería ludopatía y que habría perdido toda la suma apostando en el casino.
Mónica B., madre de una estudiante, fue una de las primeras en denunciar públicamente el caso. “Fuimos demasiado ingenuos y confiamos todo en una sola persona”, expresó en diálogo con Misiones Online. Explicó, además, que durante meses solicitaron rendiciones y siempre recibieron excusas por parte de Romina E.
Sofía V., una de las egresadas, afirmó que la noticia se conoció el mismo día de la recepción. “Había chicos llorando, sin saber qué hacer. Fue horrible”, relató.
Frente al riesgo de que la celebración se cancelara, los padres de los 35 estudiantes afectados se reunieron de urgencia en el Salón Pirámide, previsto para el evento, y lograron reorganizar los pagos más urgentes con el apoyo del intendente local.
Según detalló Infobae, pudieron reunir un faltante estimado en 8.300.000 pesos, lo que permitió desarrollar la fiesta como estaba planeado. “La fiesta se hizo igual, gracias al esfuerzo de todos”, confirmaron los alumnos.
La denuncia penal fue radicada el pasado viernes y la Justicia de Misiones lleva adelante la investigación, mientras continúa la búsqueda de Romina E. En medio de la crisis, un gesto de los estudiantes sorprendió a las familias: decidieron que la hija de la mujer denunciada participara de la fiesta, “porque ella no tiene la culpa y también merecía vivir su noche”, según expresaron los padres.


