Un gato llamado Dave, contra todos los pronósticos, volvió y se reencontró con su familia diez años después de desaparecer. El hecho ocurrió en la localidad de Hardwicke, Inglaterra.

La historia comenzó porque una familia estaba recibiendo frecuentemente la visita de un gato pelirrojo. Al ver que el felino se encontraba algo débil, decidieron llevarlo al veterinario. Allí, el doctor comprobó que el animal tenía chip.

A través del dispositivo, fueron localizados los dueños del gato, que llevaban 10 años sin saber nada de él. La dueña, Simmone Davis, no tardó un segundo en acudir a la llamada para recuperar a Dave.

"Trabajé como asistente de enfermería de animales y acogí a Dave hace unos 11 años. Le puse microchip y lo castré, pero el vagabundeo en él era casi instintivo", explicó Davis.

"Lo tuvimos durante aproximadamente un año antes de que desapareciera. Intenté todo lo que pude para encontrarlo, colocando carteles y buscándolo. Cuando nunca regresó, sólo deseamos que lo estuvieran cuidando y que estuviera a salvo", dijo la mujer.

"Le estamos haciendo pruebas ahora para su tiroides, ya que está muy frágil, pero todo lo que necesita es la vida acogedora con nosotros en casa", dije Davis, que saca una conclusión de todo lo vivido: "Demuestra que siempre debes poner microchips a tus animales". Una práctica muy común y hasta obligatoria en algunos países de Europa.

Por su parte, Matt Simonds, el hombre que llevó el felino al veterinario se alegró al enterarse del encuentro.. Pensé que podría terminar en el sistema de reubicación y estar allí durante bastante tiempo debido a la edad y a la mala salud que tenía", indicó.

"Descubrí en las redes sociales que Dave se había reunido con su dueño. Estaba tan feliz de ver esto y había tenido mis dudas sobre las redes sociales en el pasado, pero definitivamente es algo bueno, ya que he podido verlo de regreso con su dueño", concluyó, según publicó Crónica.