Leda Bergonzi se presentará en un nuevo espacio para cerrar el año en Rosario. Se trata del club Reflejos, ubicado en avenida Génova 2402. En este predio, el sábado 20 de diciembre a las 9, la líder del grupo espiritual Soplo de Dios Viviente, encabezará una “jornada de adoración, alabanza y música en vivo”, según reza la invitación. La idea es reencontrarse con su comunidad de cara a la Navidad, tal como venían haciendo con frecuencia mensual en el sindicato de Recolectores de Rosario.
“Siempre fuimos a los lugares que nos prestan, son gratuitos entonces nos vamos acomodando y siguiendo el camino que Dios quiere para nosotros”, sostuvo Leda en contacto con Radio 2 y Rosario3. Recordó que quienes deseen participar deben retirar un ticket virtual y recomendó llevar una reposera y agua. También, sugirió llevar algún alimento no perecedero para entregar de forma solidaria, como suelen realizar en cada encuentro.
La mujer a la que un nutrido grupo de seguidores le asigna “milagros”, transformaciones espirituales y también corporales gracias a su intersección, está distante de la jerarquía eclesiástica local desde el 12 de septiembre de 2024, dia en el que el Arzobispado local emitió un comunicado en el que se despegaba de la organización de los encuentros. Desde ese día, Leda ya no cuenta con el acompañamiento de sacerdotes, quienes solían celebrar misa y confesar.
Por un tiempo, las reuniones fueron suspendidas, pero retornaron con una impronta muy parecida a las que solían concretarse en la ex Rural de Rosario, con momentos de invocación divina a través de canciones de alabanza y la demanda de bendiciones de quienes creen que las manos de Leda son sanadoras.
Leda siguió presentándose en el predio del sindicato de Recolectores de Rosario una vez al mes. Desde el próximo 20, los encuentros se mudarán al club Reflejos. “Yo estoy muy bien, gracias a Dios. Terminando el año agotada pero sostenida. Con mucha ideas, con mucha oración, y con la comunidad. La verdad es que esto no tuvo un parate, fuimos recorriendo y recorriendo”, sostuvo.
En paralelo, fue consolidando su costado artístico con numerosas y multitudinarias presentaciones en teatros nacionales y de países limítrofes, en los que desgrana un repertorio de canciones religiosas y el público acompaña con rezos y nutrida gestualidad. “Estamos terminando un año que la verdad fue muy lindo. Poder atravesarlo con la comunidad, conocer tantas comunidades de afuera, tantos hermanos que se sumaron a la obra, tantas historias, ¿no? Tantas vidas”, destacó.
“Más allá de que uno se quedó como un poco detenido, más que nada en los medios de comunicación, no dejamos de avanzar, así que bueno, nuestra tarea siguió siendo bastante continua”, aclaró.
Consultada sobre la relación con la Iglesia local, respondió: “No tengo nada para decir, estamos al habla. Nosotros seguimos evangelizando. Recuerden que nuestros comienzos fueron así. Seguimos atravesando este tiempo con una fuerza que realmente viene de Dios y nos sostiene”, concluyó.
