Un equipo internacional de astrónomos logró captar una señal de radio desde el cometa interestelar 3I/ATLAS, un objeto nacido en los confines del espacio interestelar que pasó cerca del Sol en octubre de 2025. La detección se produjo gracias al radiotelescopio MeerKAT en Sudáfrica y corresponde a líneas de absorción de hidroxilo (OH) en la frecuencia de 1665 y 1667 MHz.

La señal, aunque tenue, es clara y confirma la presencia de vapor de agua en la envoltura gaseosa del cometa. Los datos también revelan un corrimiento Doppler de las líneas, lo que indica que el objeto se desplazaba a más de 68 kilómetros por segundo respecto al Sol.

Este hallazgo es significativo porque es la primera vez que se detecta un objeto interestelar en radiofrecuencia, lo que abre una nueva ventana para estudiar la composición y el comportamiento de estos cuerpos celestes, según publicó el la página especializada de National Geographic.

La detección de la señal de radio se produjo en un momento en que el cometa estaba a solo 3,76 grados del Sol, lo que hizo que la observación fuera especialmente desafiante debido a la interferencia solar y la geometría de visión desde la Tierra. A pesar de los desafíos, los astrónomos lograron captar la señal, lo que confirma la presencia de gases volátiles en el cometa y su comportamiento como un cometa activo.

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Este descubrimiento permite a los astrónomos investigar los procesos químicos activos en tiempo real y estudiar la interacción del cometa con el entorno solar y la radiación solar. La detección de la señal de radio también confirma que el cometa 3I/ATLAS es un objeto natural y no artificial, lo que descarta teorías sobre su posible origen insólito como el de ser una nave espacial de otro planeta. 

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