Tras permanecer desaparecido durante un día en el mar, el domingo fue encontrado con vida el navegante Stuart Bee, en la costa este de Florida. El hombre fue hallado por la Guardia Costera de Estados Unidos, a unos 138 kilómetros de la costa.

Las autoridades rescataron al navegante, de 62 años, cerca de las 11 de la mañana del domingo, cuando permanecía aferrado a la única parte de su embarcación que todavía no se había hundido en el mar.

Fue la tripulación de un buque portacontenedores (el "Ángeles") de casi 69 metros la que observó a Bee, cerca de Cabo Cañaveral, según indicó la Guardia Costera a través de sus redes sociales. 

El barco desde el que rescataron a Bee.

Las autoridades también coordinaron la búsqueda del navegante, enviando un Hércules C-130 y notificando a los marineros de las cercanías para que estuvieran atentos a su embarcación.

Además, la Aduana y la Patrulla Fronteriza norteamericana también ayudaron en la búsqueda.

El relato del naufragio

Bee salió de Cape Marina en Puerto Cañaveral, cerca de las 16 horas del viernes pasado, en su barco llamado Stingray, según la Guardia Costera. El sábado, un miembro de la marina informó de su desaparición diciendo que Bee no suele pasar la noche en su barco.

La suboficial Veronica Dunn-Depretis manifestó a ABC News que durante las horas que quedó varado en el mar, en medio de la oscuridad de la noche, Bee estuvo aferrado a la última parte de su bote, que aún estaba por encima del agua.

El hombre se sujetó de la única parte de su barco que aún no se hundía.

David Micallef, contramaestre de la Guardia Costera de primera clase, contó que el domingo por la mañana, cuando el bote se encontraba más cerca de la costa, Bee se quitó la camisa y la agitó para llamar la atención.

Fue después del amanecer que la embarcación "Ángeles" lo divisó y emprendió el operativo de rescate, subiendo al navegante que no resultó herido.

En las imágenes difundidas por la Guardia Costera, se puede ver a Bee nadando hacia una boya salvavidas naranja y subiendo a bordo del barco.

Bee nadó hasta una boya salvavidas naranja que le arrojaron para rescatarlo.

En cuanto a la embarcación de Bee, Micallef detalló que se hundió en el mar por un problema mecánico. 

"Es una historia increíble. Estamos muy agradecidos al buque de motor Angeles y a toda su tripulación por haber mantenido una vigilancia tan aguda (...) Y estamos muy agradecidos, especialmente durante esta temporada de fiestas, por poder traer a este hombre a casa con su familia", indicó Micallef.

El navegante no resultó herido.

Por su parte, el capitán Mark Vlaun, oficial al mando del Sector Jacksonville, expresó: "Salvar vidas en el mar es nuestra mayor vocación. Este es un resultado verdaderamente increíble que demuestra el vínculo entre todos los marineros y nuestra comunidad".

"Gracias a nuestros compañeros de misión que se lanzan a la acción y a todos los que corrieron la voz para encontrar y rescatar al señor Bee", agregó.