En plena ola de calor, vecinos de la zona noroeste de Rosario llevan 30 horas sin luz. Según explicaron, el problema radica en que el transformador que la Empresa Provincial de la Energía (EPE) tiene para abastecer la zona no alcanza para cubrir la demanda y termina colapsando.

La situación generó profundo malestar entre los habitantes de Navarro al 8000 ya que muchos tuvieron que descartar los alimentos que tenían en su heladera. "Tengo una pequeña Pyme de venta de empanadas. La otra vez tuve que tirar todos los insumos y ahora voy a tener que hacer lo mismo, porque se pierde la cadena de frío", lamentó en Cada Día (El Tres) una mujer.

“La mayoría de los vecinos venimos reclamando a la EPE y se pasan la bola entre ellos. Mientras tanto van emparchando el transformador, pero eso ya no alcanza. Hay desidia y falta de mantenimiento por parte de la empresa”, relató otro de los vecinos afectados.

De acuerdo a su testimonio, la falta de luz siempre afecta a las mismas 10 o 15 cuadras del barrio. Algunos optaron por buscar alojamientos alternativos para pasar la noche, pero la mayoría decidieron quedarse y soportar el calor por miedo a los robos. "En casa no podíamos ni salir al patio por el miedo a la inseguridad", remarcó 

“Anoche aprovechando la falta de luz a un vecino le robaron las ruedas del auto. Esto se transforma en una boca de lobo porque la luz de la calle también se corta. Estamos muy mal”, lamentó otro de los damnificados.