Ingenieros de la NASA desarrollaron y probaron, en el Área de Pruebas del Centro de Vuelo Espacial Marshall, Estados Unidos, el primer motor de cohete de detonación rotativa a gran escala. Este novedoso motor de cohete con un diseño avanzado podría cambiar significativamente la forma en que se construyan los futuros sistemas de propulsión.

Durante la prueba de validación, el motor se activó más de una docena de veces, por un total de casi 10 minutos de duración.

El experimento logró su principal objetivo al demostrar que sus componentes, hechos de novedosos diseños impresos en 3D con la aleación de cobre GRCop-42, desarrollada por la NASA, podían funcionar durante períodos prolongados en entornos de calor y presión extremos generados por detonaciones.

La NASA valida un diseño de propulsión revolucionario

Durante su operación, el propulsor generó más de 17.793 N de empuje durante casi un minuto, a una presión de cámara de 429 N por centímetro cuadrado en promedio. Este valor constituyó el registro de presión más alta para este diseño.

El RDRE se diferencia por tener un motor de cohete tradicional que genera empuje mediante un fenómeno de combustión supersónica conocido como detonación. Este diseño produce más energía de impulso y usa menos combustible que los sistemas de propulsión actuales. Esta exitosa demostración acerca la tecnología a su uso con futuros vehículos de vuelo. Estos motores permitirán mover más carga útil y masa a destinos en el espacio profundo durante la exploración espacial, según publicó RT.