Del proyecto “Comunicar: Inclusión Social” desarrollado por la Universidad Nacional de Rosario (UNR) participan estudiantes universitarios, docentes e investigadores, graduados, asociaciones civiles y organismos gubernamentales, con el objetivo de generar espacios de cooperación e intercambio al servicio de la comunidad.

Las actividades del taller realizadas incluyen un espacio de publicación gráfica, un taller de comunicación, un taller de expresión y juego, capacitación para la búsqueda de empleo y encuentro con el deporte. También otras producciones, como la muestra itinerante de fotografía, audiovisuales, boletín virtual informativo, organización de foros y jornadas, centro de documentación y sistema de formación. El programa se encuentra abierto a las propuestas de actividades de los participantes, construidas desde los propios intereses de los jóvenes implicados y es por esto que su naturaleza es flexible.

La práctica educativa llevada a cabo genera aportes en función de favorecer los lazos sociales entre los jóvenes adolescentes que se encuentran dentro del sistema penal, y de este modo se apunta a prevenir la delincuencia juvenil. Las tareas desarrolladas dejan en evidencia el fuerte compromiso social que los estudiantes, docentes e investigadores asumen frente al desafío del desarrollo comunitario.

Patricia Real, directora del proyecto, destacó que lo que se busca es construir medios de expresión, comunicación y producción que posibiliten la participación activa de estos jóvenes, para fomentar lazos afectivos que permitan mejorar su calidad de vida. “Por la imagen que muchas veces transmiten los medios masivos de comunicación, los jóvenes que viven en lugares periféricos son tildados de peligrosos, lo que los excluye cada vez más. Hay que cuestionar la responsabilidad que tenemos como adultos o funcionarios de la universidad en esta problemática”, expresa.

“La actividad principal reside en los encuentros que realizamos con los jóvenes a los que nos dirigimos. Adolescentes que se encuentran en situaciones difíciles, que viven en entornos donde prima la violencia, el delito, el abandono, la soledad, la dificultad para llevar adelante metas. Consideramos imprescindible para cualquier tipo de proyecto social el sostenimiento de encuentros periódicos donde se realice una evaluación colectiva de la experiencia”, destaca Patricia Real.

El proyecto fue aprobado, desde 2006, en las convocatorias del Programa de Voluntariado Universitario de la secretaría de Políticas Universitarias del ministerio de Educación de la Nación y en él participan diversas facultades, centros y cátedras de la UNR, entre ellas la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales, Facultad de Psicología, Derecho, Ciencias Médicas, Humanidades y Artes; y el Centro de Investigación y Desarrollo Social (CEIDES).

Fuente: Universidad Nacional de Rosario