Con todo el brillo y el calor cerró anoche en la zona norte de la ciudad el festejo del carnaval. Con la melancolía propia del final de fiesta pero con la satisfacción de haber alcanzado los objetivos se puso fin a la celabración de Rey Momo.

Este año la convocatoria alcanzó a unas 50 mil personas que se hicieron presentes en las seis fechas que duró la tradicional fiesta.

A pesar de las altas temperaturas la noche tuvo de todo: fuegos artificiales, baile, espuma y la elección de los reyes del carnaval. 

Por seis días la avenida de las Tres Vías, entre la Travesía y Alberdi, se convirtió en un sambódromo, que fue sede de Todo el Barrio es Carnaval una actividad organizada por la Municipalidad cada año para esta fecha.

Por ese espacio desfilaron las comparsas Percusión Oeste, Estrella de Rosario, Libertad, Caléndula, Revelación do Samba, La Gran Pandilla, Ará Mixú, Imperio del Sol, Escuela de Carnaval, El Sueño del Rey Momo y Alto Ritmo Fonaverá. También mostraron su perfil rioplatense las murgas rosarinas Somos lo que Somos, Mirines y Caídos del Puente, y la santafesina Auténticos Payasos.

Pero el despliegue de plumas, lentejuelas y brillos lo trajeron los correntinos de Sapucay y Yerokí Verá. La primera comparsa con 120 integrantes y la segunda con 60, hicieron gala de su experiencia en estas lides y le pusieron temperatura litoraleña a la ya acalorada noche rosarina

Además, se premió a los mejores disfraces y máscaras, mientras las murgas y comparsas locales se mezclaban con Sapucay y Yerokí Verá, las invitadas de la provincia de Corrientes.