Tener un sobrepeso de sólo 5 kilos favorece el aumento el riesgo cardiometabólico. Esto quiere decir que justamente por esos kilos de más se incrementa la posibilidad de sufrir enfermedades cardiovasculares y metabólicas que tienen serias consecuencias. Entre éstas se encuentran la diabetes, la hipertensión arterial y el colesterol elevado.

Por esta razón, los especialistas reunidos en el Taller de Sobrepeso y Riesgo Cardiometabólico, realizado gracias al apoyo de la Fundación Argentina de Nutrición (FAN), expusieron que es necesario encarar estrategias eficaces para bajar de peso antes de que la situación empeore, ya que a mayor sobrepeso, mayor es el riesgo de mortalidad.

De hecho, cuando disminuye el sobrepeso -aún cuando el descenso es "modesto" (entre 5 y 10 por ciento del peso corporal)- los factores de riesgo mejoran, razón por la cual es necesario implementar estrategias que permitan bajar en forma efectiva.

"La intención no es dar un mensaje alarmista a la población, sino simplemente generar conceptos claros. Tal como indica la definición de obesidad a la cual más adhiero en lo personal, que reza que se trata de un ´aumento de grasa corporal, frecuentemente acompañado de aumento de peso, cuya magnitud y distribución condicionan la salud del individuo´, es importante que entendamos que es riesgoso vivir con un peso que está por encima de lo ideal para cada uno. No obstante, hay que tomar en cuenta otros parámetros entre los cuales se destaca la cantidad de grasa corporal y el lugar de localización de ésta, algo que se puede saber simplemente midiendo el perímetro de cintura (PC) de una persona", expuso el doctor Silvio Schraier, médico especialista en Nutrición, y presidente de la FAN.

"Sin embargo, tenemos que ser muy cuidadosos -completó el especialista- ya que si bien técnicamente toda persona que tiene kilos de más, tiene sobrepeso, hay ciertas instancias o más bien determinados excesos que no resultan riesgosos, al menos a priori, desde el punto de vista de la salud".

Ocurre que según comentó el doctor Schraier, no hay que generalizar, sino por el contrario evaluar cada caso en particular. "Retomando, por ejemplo, el concepto de obesidad genoide y obesidad androide o si se quiere el más cercano del cuerpo con forma de pera o de manzana, nos damos cuenta de que si bien es importante que en el organismo haya grasa, esa grasa tiene que localizarse en los lugares adecuados y no en sitios donde represente un riesgo como sucede con la grasa abdominal".

Por eso los especialistas hacen tanto hincapié en que los médicos tomen en sus consultas el perímetro de cintura. "Esta simple medición que se realiza con un centímetro común nos permite ´predecir´ qué ocurre dentro del organismo de una persona", especificó Schraier, quien aclaró que debe tomarse esta medida alrededor de "la panza" del paciente, pero también de arriba hacia abajo con el paciente acostado boca arriba en una camilla.

"La circunferencia de cintura elevada -en los hombres por encima de los 102 cm y en las mujeres más de 88 cm- es un factor de riesgo independiente, que no se relaciona con la existencia de colesterol alto o hipertensión", sostuvo el presidente de la FAN y director de la Carrera de médicos especialistas en Nutrición de la Facultad de Medicina de la UBA.

Fuente: Pro Salud News