La jornada electoral tuvo un cómplice: el clima. El buen tiempo seguramente ayudó a que, a diferencia de las internas abiertas de julio, la gente fuera a votar no tan tarde.
Es que después de emitir el sufragio estaba para aprovechar el día. Y eso se notó en parques y plazas de Rosario que estuvieron colmados de gente. Hasta en el laguito del parque Independencia, a pesar de que la falta de agua impedía el clásico paseo en bote.