Un poco de paz, es todo lo que pide Susana Gimenez tras una semana en la que su nombre se escuchó hasta en la Unesco por la construcción de una mansión en Uruguay. La otrora diva de los teléfonos aprovechó un rato libre para tomar sol y mostrar que el objetivo de bajar de peso este año tuvo éxito.

Los problemas de Susana comenzaron cuando una organización denunció que los terrenos que adquirió para construir la casa son "patrimonio de la humanidad" y que no se puede edificar en ellos.

Posteriormente se dijo que que la conductora “tomaba” granitos y piedras de la reserva Sierras de Garzón para el quincho y la parrilla. Pero, finalmente, la intendencia de Maldonado (Uruguay), dijo que todo está en orden.

Ante tamaño ajetreo, Giménez se tomó una tarde para descansar en medio de un año sabático. La diva paseó con una bikini por el jardín de La Mary y la revista Pronto aprvechó el momento para tomar algunas fotos.

La diva mostró los frutos de tanta dieta y lució una figura distinta. Giménez había señalado que uno de sus objetivos este año era bajar de peso.