Desde el gremio Smata evidenciaron “preocupación” por la posible pérdida de cientos de puestos de trabajo en la planta de General Motors de la localidad de Alvear el año que viene. Advierten que en los próximos meses se dejarán de fabricar dos modelos de la marca Chevrolet allí y estiman que “con el armado de un solo producto no se van a poder mantener los 2.300 puestos de trabajo. Hay diálogo con las autoridades de la empresa y los sindicatos de la industria de Santa Fe conformaron un frente para trasladar sus inquietudes a la Municipalidad de Rosario y al gobierno provincial.

Marcelo Barros, secretario general de Smata Rosario, habló de esta situación en contacto con el programa Hoy es siempre todavía (Radio 2). Allí adelantó que temen por la posible pérdida de unos 800 puestos de trabajo en 2017.

“Estamos preocupados no por la actualidad, porque hasta marzo no tendríamos problemas, pero el mes que viene se deja de fabricar el Chevrolet Corsa y el mes siguiente el Ágile, y creemos que solo con el Cruze no se van a poder mantener los 2.300 puestos de trabajo”, consideró el sindicalista.

“Se lo hemos planteado a la empresa y ellos nos dicen que está todo bien, pero nosotros estamos visibilizando el problema a futuro”, agregó.

Barros advirtió que “si no viene un nuevo producto para fabricar acá en Alvear, vemos un panorama complicado a futuro”.

El representante de Smata dijo que “en lo que va del año hubo unos 500 retiros voluntarios, que vendrían a ser despidos encubiertos”. Luego aclaró: “Nosotros no tenemos suspendidos, como sí tienen en la planta de Córdoba”.

El gremialista indicó que “las ventas en el sector han caído notablemente y los que más se venden son los productos que se fabrican en Brasil y en otros lados, no es mano de obra argentina”. Y destacó que “los dos nuevos productos que presentó General Motors no se fabrican acá”.

“En el tema automotriz somos Brasil-dependientes; si Brasil no levanta, eso también nos complica”, reconoció.

Barrios mencionó que “está muy difícil también la colocación de equipos de gas; de tres que se colocaban por día, ahora se instala uno por mes”. Y deslizó que “en el futuro esto también va a perjudicar a los trabajadores de estaciones de servicio”.

Por último, Barros confirmó que “hemos conformado una unidad entre todos los gremios y estamos armando una agenda para trasladarle nuestras inquietudes a la intendenta y al gobierno provincial”.