Ya empieza a desplegar sus alas el avión más grande del mundo. Se trata de el Airbus 380, que es capaz de trasladar a 850 pasajeros y hará su primer vuelo comercial el 25 de octubre de Singapur a Sydney con Singapore Airlines. A pesar de las buenas nuevas, el retraso de 18 meses en la entrega de la aeronave empañó la fiesta y sus directivos están bajo investigación.
El fabricante aeronáutico europeo Airbus entregó este lunes a la compañía Singapore Airlines el primer superjumbo A380, el avión comercial más grande del mundo, en una ceremonia celebrada en el aeropuerto francés de Toulouse-Blagnac.
"Este es un día en que podemos estar orgullosos", dijo el presidente de Airbus, Thomas Enders, tras agradecer "el apoyo que dieron a Airbus y la fidelidad en tiempos de dificultad".
Se refirió así a las demoras que sufrió la entrega de la primera unidad, que fue aplazada en diversas oportunidades a lo largo de dos años.
El Airbus Superjumbo A380 entraría en servicio a fines de este mes y tiene una capacidad máxima de 850 pasajeros, aunque la compañía lo configurará para dar cabida sólo a 471 pasajeros, según informó la agencia DPA.
La última demora en la entrega de la unidad se produjo, en junio del año pasado, por problemas de cableado originados en un software defectuoso, y derrumbó el valor de las acciones de Airbus y su casa matriz, EADS, forzando además una reestructuración en la cúpula de ambas empresas.
No obstante, en esta oportunidad, Enders subrayó en Toulouse: "no creo que haya nuevas demoras".
En tanto, el periódico francés "Journal du Dimanche" señaló en su última edición que Airbus no está seguro de poder entregar los próximos 13 modelos A380 durante el año 2008, tal como prometió.
Cinco de estas máquinas engrosarán la flota de Singapore Airlines, cuatro serán para Emirates Airlines y otras cuatro para la australiana Qantas.
La versión del periódico, que atribuye los problemas a la persistencia de defectos en el sistema de cableado, se considera veraz, porque el rotativo pertenece al grupo Lagardere, uno de los mayores accionistas de EADS.
El acto de entrega también fue opacado por la investigación contra 21 altos ejecutivos de Airbus, incluyendo a Enders, por la supuesta venta de acciones de EADS con información privilegiada cuando los problemas del A380 aún no se habían hecho públicos.
Fuente: Télam