El Defensor Regional Gustavo Franceschetti sostuvo la detención la semana pasada de los tres padres cuyos hijos hicieron los falsos avisos de bomba, fue “exagerado e incluso abusivo”. Los tres fueron liberados poco más de 24 horas después del arresto e imputados por el delito de intimidación pública.

“Lo que ha hecho la Fiscalía es una exageración. Se usó un cañón para matar a un mosquito cuando había disponible otras opciones”, llamó la atención Franceschetti en contacto con A Diario, el programa que conduce Alberto Lotuf por Radio 2.

Para el defensor la cantidad de amenazas falsas de bomba “es un problema que hay que abordar” pero advirtió que la detención de los padres fue un exceso y advirtió que ningún padre en ningún país del mundo puede ser responsabilizado por los delitos del hijo.

“Se usó un cañón para matar a un mosquito cuando había disponible otras opciones”, cuestionó e insistió: “Digo que es una exageración, incluso abuso, porque de antemano para dictar prisión preventiva, para detener a una persona, hay que reunir varios requisitos. El primero es que sea el probable autor del hecho delictivo y acá estaba claro desde el inicio que los hijos habían reconocido que habían sido ellos y que los padres no tenían conocimiento”.

En lo que va de 2017, la Municipalidad participó de más de 100 operativos por amenazas de bombas en escuelas y más del 70 por ciento se concentraron en el centro. El dato, que se puede ver con toda su dimensión en el mapa interactivo de Rosario3.com, refleja una doble preocupación para las autoridades. Por un lado, la cantidad que sigue en aumento y genera un costo de unos 50 mil pesos por despliegue y, por el otro, la sospecha de que esa concentración geográfica tiene como objetivo "alterar el clima de la ciudad".