El canje de deuda por educación, la mejora y modernización de esta última, la obligatoriedad de la escuela secundaria y la interacción cultural centraron las intervenciones de Argentina, Perú, México y Bolivia en la 35ª Conferencia General de la UNESCO en París.

El ministro argentino de Educación, Alberto Sileoni, el primero en intervenir ante los delegados de los 193 países miembros de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, que celebra su Conferencia General del 6 al 23 de octubre, ratificó el valor del "canje de deuda por educación" como "herramienta que permite obtener recursos para la educación de nuestros países".

Fuentes diplomáticas argentinas indicaron que el país impulsa una resolución para crear una comisión que estudie la reactivación de ese mecanismo para el período 2010/211. Recordaron que el último canje de deuda por educación de un país latinoamericano fue el de Bolivia con España.

La iniciativa cuenta con el apoyo de Perú y Filipinas, entre otros países, precisaron esas fuentes. "Sostenemos que la inversión educativa debe estar protegida, al resguardo de las crisis económicas que reiteradamente nos afectan", afirmó Sileoni.

El 10% de la población de América Latina -donde 184 millones de personas (34%) viven en la pobreza- es analfabeta. Y casi el 40% no terminó el ciclo de educación primaria, según datos de la Organización de Estados Iberoamericanos (OIE). Según la UNESCO, el gasto público promedio en la región destinado a educación es del 4,1% del Producto Bruto Interno (PBI).

El responsable argentino anunció que el actual gobierno declaró la "obligatoriedad" de la educación secundaria y se propone modernizar las herramientas escolares. En tanto, el secretario mexicano de Educación, Alfonso Lujambio, se refirió al proyecto lanzado por el gobierno del presidente Felipe Calderón bajo el nombre Alianza por la Calidad de la Educación que defiende una "educación de calidad" como un factor de "equidad y justicia" que prepare a las nuevas generaciones "para enfrentar los complejos retos de la convivencia humana de la globalización".

La viceministra de Gestión Institucional del Estado Plurinacional de Bolivia, Mónica Soriano López, que saludó en aimara, la "lengua nativa" de su país, abordó de entrada "la interculturalidad", fenómeno del que Bolivia es ejemplo con sus 36 etnias porque es una "riqueza cultural extraordinaria pero a la vez entraña un desafío enorme en la construcción de consensos y acuerdos, donde todos no han tenido ni tienen los mismos derechos".

Por esta razón hizo hincapié en que para hablar de "verdadera democracia" no basta con votar, sino que debe alcanzarse una "democracia cultural".

"No existirá democracia cultural si los distintos grupos sociales no logran expresarse ni integrarse, si antes no se han democratizado los derechos de las personas", afirmó López, quien defendió la nueva Constitución de Bolivia.

Perú defendió la educación como una "poderosa arma, irremplazable por ser pacífica, para luchar contra la pobreza". El embajador peruano ante la UNESCO, Harry Belevan McBride, destacó el plan de alfabetización desplegado por su país que entre 2007 y 2008 llegó hasta 860.000 personas y se propone alfabetizar a 1,3 millones antes de 2011. También resaltó el papel de la innovación tecnológica y de la ciencia en la educación.

Fuente: UNESCO