Julieta Venegas y el músico argentino Rodrigo García Prieto tuvieron una relación que comenzó en 2009. Fruto de ese amor, nació Simona. Tras la separación, en malos términos, el músico argentino reclama porque no puede ver a la nena.
Aprovechando la visita de la vocalista al país –la misma que la trajo la Rosario el pasado miércoles–, la familia de García Prieto la escrachó durante una actuación en el teatro Gran Rex, de Buenos Aires.
"Estamos reclamando los derechos de Simona, que pueda estar con su familia de Argentina. A raíz de la separación, se está haciendo un juicio por la tenenencia compartida, y no hay más relación con Simona", aseguró a Infama Irma, la madre de Rodrigo García Pietro.
La abuela de Simoma comentó que desde hace un año no puede ver a su nieta.
La batalla legal por el régimen de visitas se libra en la justicia de México y contempla un reclamo por tenencia compartida. Además, el papá quiere que la nena lleve también su apellido, ya que Julieta la anotó sólo con el apellido materno.
Venegas optó por no hacer declaraciones sobre este conflicto legal.


