Amsterdam talará el "árbol de Anna Frank". El ayuntamiento de esa ciudad europea ha decidido talar el castaño centenario porque padece una enfermedad que ha podrido el tronco y las raíces.

Anna Frank habla en varias ocasiones en su diario sobre el árbol, situado en un jardín de una casa en el canal paralelo al de la vivienda de la niña judía y que pude verse desde una de las ventanas interiores.

El castaño tiene entre 150 y 170 años y es uno de los árboles más viejos de la capital holandesa.

Las autoridades locales decidieron su tala al constatar que su tronco está podrido, ya que está afectado por un hongo cuya invasión está tan avanzada que no puede tratarse.

Una vez talado, se plantará en el mismo lugar un esqueje del castaño.