El municipio deberá estudiar la posibilidad de implementar en la vía pública luces inteligentes con tecnología LED y sensores de detección, que permiten ahorrar energía y aumentar su intensidad cuando se detectan movimientos. El Concejo aprobó en la sesión del jueves pasado un proyecto del edil radical Jorge Boasso para que el Ejecutivo estudie la factibilidad de la iniciativa.

Según detalló el concejal, las luces inteligentes deberán estar conectadas entre sí por medio de una red y en coordinación con las cámaras de seguridad para obtener además datos valiosos sobre niveles de contaminación, temperatura, humedad, controlar excesos de velocidad, advertir accidentes.

La función de la tecnología es regular la intensidad cuando detectan algún movimiento, permitiendo así aumentar la luminosidad del suelo, mejorar las zonas mal iluminadas y proporcionar ahorro energético con el consecuente cuidado del medio ambiente.

“El funcionamiento del sistema es sencillo: desde tempranas horas de la mañana hasta el anochecer, franja horaria de máximo tránsito, las luminarias LED están encendidas al 100 por ciento de su capacidad, luego si no hay nadie en la calle se mantienen con un consumo mínimo (aproximadamente del 30 por ciento) y si detectan a alguien, su nivel de iluminación se eleva en consecuencia, a un 80 por ciento”, detalló Boasso.

La iniciativa constituye una solución al ahorro energético, al reducir hasta un 80 por ciento el consumo de energía frente a las convencionales, basándose en tecnologías de alta eficiencia y sensores de detección de movimientos.

Al consumir menos electricidad, reducen la contaminación motivada por el uso de la energía, basada en buena parte en combustibles fósiles y nucleares, así como la emisión de gases de efecto invernadero, implicados en el cambio climático. Como iluminan sólo cuando es necesario y de forma direccional, la contaminación lumínica también disminuye.