La situación quedó en evidencia tras el accidente ocurrido en las últimas horas en la autopista Rosario-Roldán en el que sufrió heridas de gravedad Claudio Basso, el ganador del reality de  Operación triunfo. El auto en el que el artista viajaba impactó contra una vaca que atravesó la cinta asfáltica. El animal provocó un choque en cadena que involucró a otros vehículos. Por fortuna, no hubo víctimas fatales, pero las consecuencias podrían haber sido peores.

Para los vecinos de la ciudad de Roldán, ubicada a escasos 30 kilómetros de Rosario, el problema no es nuevo. Desde hace años vienen pidiendo a las autoridades municipales que multen a los dueños irresponsables que largan los animales a pastar en zonas cercanas a la ruta, sin prever los daños que pueden ocasionar. Así lo relató a Rosario3.com Jorge Esponda, padre de Pablo, un joven que en el año 2004 sufrió un accidente que pudo costarle la vida.

“Pablo manejaba la camioneta por la ruta AO12, en dirección hacia el norte, a unos 200 metros del cruce con la 9", rememora Jorge, "cuando al revés de la mayoría de los accidentes que se producen en la zona, el vehículo fue embestido en forma lateral por un caballo que cruzó velozmente la ruta. El animal se metió literalmente en la cabina, por el lado del acompañante, e hizo que estallara el parabrisas y se rompieran todos los vidrios. Mi hijo viajaba solo y milagrosamente se salvó”, cuenta aún conmovido su padre.

Pero ahí no termina todo. Jorge, al igual que otros tantos ciudadanos de Roldán, lleva efectuadas 37 presentaciones ante diversos organismos oficiales de la ciudad –Municipalidad, Concejo Deliberante, Policía y Tribunal de Faltas– a fin de que se legisle sobre el tema y se multe a quienes no se hacen cargo de los animales sueltos como caballos y vacas que vagan libremente por las banquinas, sin marca a fuego que permita identificar a los propietarios.

Por su parte, el intendente de la ciudad, José María Pedretti, reconoce que el tema es problemático, pero explica que la Municipalidad no tiene recursos como para montar un corralón al que se deriven los animales sueltos. “No podemos mantener económicamente a los animales hasta que aparezcan los dueños o la Justicia resuelva en cada caso” se excusó Pedretti, y agregó que en Roldán se dan varios fenómenos que provocan esta situación. “Por un lado, hay un stud donde se crían caballos con fines comerciales, hay una escuela de equitación, y también gente humilde que tiene animales y los deja atados al costado de la ruta, o detrás de un alambre para que coman, sin asegurarse de que no logren escapar y provoquen accidentes”.

En 2004, el Concejo trató el tema y propuso la construcción del tan solicitado corralón para los animales sueltos, pero el intendente vetó entonces varios artículos de la norma, entre ellos el relacionado con el corralón. “No nos podemos hacer cargo de todo –defiende Pedretti– aprobarlo significa que después tenemos que solventarlo y hoy no estamos en condiciones de hacerlo”.