A las piñas en la popu

Una situación que viene produciéndose bastante seguido se repitió este domingo en el Coloso. En un momento del primer tiempo, la atención de todo el estadio se trasladó a la popular local, donde se tomaron a golpes de puño algunos hinchas de la Lepra. En verdad, un grupo agredió a un solo simpatizante que, según cuentan, estaba bastante identificado con la anterior conducción institucional de Eduardo López. NI bien se dieron cuenta de quién se trataba, le propinaron una paliza de la que el muchacho pudo al fin escaparse. Accionar totalmente repudiable de una facción de la banda rojinegra.

La Reserva, dos bostezos

En el juego preliminar, los equipos de Newell´s y Godoy Cruz igualaron 0 a 0. Fue un encuentro con varias ocasiones de gol, que no pudieron ser cristalizadas en los arcos. La formación elegida por el DT leproso, Ricardo Johansen, fue la siguiente: Hoyos; Chávez, Machuca, Fideleff, Díaz; Miró, Casio, Verón, Zani; Steinert, Dening.

Paragua resistido

¿Dónde quedó aquel idilio generado por su gol victorioso ante Central en el mismísimo Gigante canalla? No parecen tan lejanas las imágenes de Santiago Salcedo “encapuchado” gritando bien fuerte su tanto en Arroyito, o de la ovación el día de su regreso de River. Pero está claro que ese amor sufrió un desgaste, y ya no es tan sólido el vínculo entre Sá-Sá y la hinchada ñubelista. Este domingo, y como una consecuencia de su flojo rendimiento en los últimos encuentros, la mayor parte del estadio acompañó con silbidos cada una de sus participaciones. El paraguayo no encuentra su nivel, los hinchas se lo reprocharon y el guaraní se fue haciéndole gestos a un plateísta que lo hostigó cuando fue reemplazado por Da Silva.

El Gato y el Ratón

Uno de los focos de atención que el partido tenía en la previa era el choque entre hermanos que iban a protagonizar Mauro y Lautaro Formica, delantero y defensor de Newell´s y Godoy Cruz respectivamente. Pero a decir verdad no hubo ningún encontronazo de los que pronosticaron ambos en la semana en Radio 2; solo coincidieron en la posición en la cancha cuando Mauro se corrió a la derecha del ataque, durante el primer tiempo, pero ambos disputaron cada balón con profesionalismo y sin ninguna pierna fuerte. El Gato y el Ratón, Mauro y Lautaro, vivieron un encuentro apacible.

Memo inolvidable

Iván Borghello, delantero de Godoy Cruz, comprobó este domingo que sus goles en aquel campeonato Apertura 2004 dejaron una marca indeleble en el corazón del hincha leproso. Los tres costados ñubelistas del Coloso le dieron una calurosa bienvenida al atacante que marcó varios tantos importantes en la gesta del equipo del Tolo, al cabo la última del club en Primera. En cambio, al Sapito Encina lo trataron bastante mal: cada vez que tocó la pelota, un coro de insultos bajó de las tribunas locales recordándole su pasado canalla.